El Banco Central Europeo probablemente absorberá efectivo del sistema bancario para compensar cualquier compra de bonos dirigida a limitar los costes de los préstamos de los Estados endeudados de la eurozona, según recoge Reuters, que cita dos fuentes cercanas.

Los rendimientos de los bonos de Italia y otros países cargados de deuda se han disparado, después que el BCE desvelara sus planes de dejar de comprar deuda y subir sus tipos de interés por primera vez en más de una década el mes que viene para luchar contra una inflación galopante.

La agitación de los mercados ha obligado al BCE a acelerar su trabajo en un nuevo plan de compra de bonos para frenar los rendimientos soberanos. Esto le deja en la difícil posición de aumentar los costes de los préstamos para el conjunto de la zona del euro, mientras que al mismo tiempo los limita para algunos de sus miembros más débiles.

Para evitar esta aparente contradicción, el BCE está estudiando la posibilidad de combinar el nuevo plan de compra de bonos con subastas en las que los bancos puedan depositar su dinero en el banco central a un tipo de interés más favorable que el tipo de depósito ordinario, según las fuentes con conocimiento directo del asunto.

Esto permitiría al BCE "esterilizar" las compras de bonos bajo el nuevo esquema, en una repetición de sus operaciones semanales de "absorción de liquidez" de hace una década. Estas ofrecían a los bancos un tipo de interés igual al de la operación de refinanciación del BCE, que entonces era del 0,25%.

Según ha dicho la propia presidenta del BCE, Christine Lagarde, "el nuevo instrumento tendrá que ser eficaz, a la vez que proporcionado, y contener suficientes salvaguardias para preservar el impulso de los Estados miembros hacia una política fiscal sólida". Así lo ha asegurado en el foro anual del BCE celebrado en la ciudad portuguesa de Sintra.

Con el BCE preparado para subir los tipos de interés por primera vez en una década el mes que viene, Lagarde dijo que el banco central actuará de forma gradual pero con la opción de actuar de forma decisiva ante cualquier deterioro de la inflación a medio plazo, especialmente si hay signos de desanclaje de las expectativas de inflación.

¿Funcionarán los planes del BCE?

Según apunta Pablo García, director de Divacons Alphavalue, "esa Europa de las dos velocidades es una realidad; Grecia, Portugal, España e Italia van a tener tires más altas". Por eso considera que preparar esa herramienta para inyectar de nuevo capital para intentar proteger a los países periféricos sirve también hacer "trampas al solitario para que el inversor, institucional sobre todo, compre bonos soberanos".

En opinión del experto, este intervencionismo va a ralentizar los efectos de las subidas de tipos, mientras que Estados Unidos está atacando la inflación de manera frontal. "En Europa estamos tomando medidas que son parches y no nos estamos adelantando a la que se nos viene con la inflación", por lo que el experto considera que son medidas negativas a largo plazo e inapropiadas para frenar la inflación.