Las automotrices comentan que la espera para un automóvil nuevo es aproximadamente de seis meses. A ello hay que agregar la fuerte demanda de coches eléctricos debido entre otras cosas a mayores limitaciones para circular a aquellos coches "que contaminan", así como a una conciencia a reducir las emisiones de carbono, a estar de "moda" e incluso a beneficiarse del plan Move II ofreciendo planes como el Moves III que ofrece ayudas a la compra de vehículos eléctricos e híbridos enchufables.

En marzo publicamos una nota ¿Cómo aprovecharse de la escasez de chips vía fondos de inversión? en la se comentaba, entre otras cosas, los esfuerzos que estaban haciendo tanto la Unión Europea como el Congreso de los EE.UU. para promover la construcción de fábricas de semiconductores y así poder aliviar la situación. Incluso había expertos en la materia y ejecutivos de la propia Taiwan Semiconductors (TSMC) que vaticinaban que esta situación de escasez podría permanecer hasta la segunda mitad del 2021. Y aquí estamos, mediados de octubre y ahora expertos como Matt Murphy, director ejecutivo de Marvell Technology y la propia Taiwan Semiconductors tras la publicación de resultados, advierten que la situación podría extenderse hasta 2022. Otros ejecutivos de la industria de chips, como la directora ejecutiva de AMD, Lisa Su, han señalado que la capacidad de fabricación adicional comenzará a abordar esos problemas el próximo año. Murphy comenta que lleva 27 años en la industria y nunca había visto cosa igual.

La escasez ha perjudicado a varios sectores, como se ha podido ver durante la semana pasada con los datos de producción industrial de agosto de la UEM, que cayó -1,6% m/m, con la de alemania cayendo 4% en agosto, derivado de los problemas de suministros. La fabricación de vehículos y componentes registró en agosto una caída del 17,5 % y la de maquinaria, un 6,3%. La vital industria automovilística alemana se ha visto gravemente afectada este año y se han anunciado ya cierre  de fábricas hasta 2022. Tal es el caso de Opel anunció recientemente que las operaciones en su planta de Eisenach en Alemania se detendrán hasta "principios de 2022", por la escasez global de microchips frena la producción, suspendiendo la construcción de la SUV Grandland y les ha dicho a los empleados que serán trasladados al trabajo a tiempo parcial. Mientras que el CEO de VW lamenta la pérdida de cuota de mercado debido al mismo problema. Y se suman BMW, Daiimler y Volkswagen, cuyo CEO lamentó la pérdida de cuota de mercado que ha generado esta problemática.

Según estimaciones de la Asociación Alemana de la Industria Automotriz, Alemania producirá 2,9 millones de automóviles en 2021, un 18% por debajo de la débil cifra para 2020 y un tercio menos que la producción registrada en 2019. En todo el mundo, alrededor de 10 millones de automóviles no se fabricaron por falta de piezas, según estimaciones de la consultora de gestión Boston Consulting Group, lo que supondría una pérdida de alrededor de 200.000 millones de dólares en ventas.

General Motors comentó la semana pasada que las ventas de vehículos estadounidenses durante el tercer trimestre cayeron más de un 30% año tras año debido a que la escasez de chips interrumpió la producción y redujo el inventario disponible en los concesionarios. El mes pasado, el fabricante de automóviles cerró la producción en la mayoría de sus plantas norteamericanas nuevamente debido a la falta de chips semiconductores. Esa escasez de suministro ha obligado a General Motors a cambiar sus chips disponibles solo a sus vehículos más populares y rentables, como las camionetas.

En general, se espera que las ventas de automóviles en Estados Unidos caigan al menos un 13% en el tercer trimestre debido a la interrupción de la producción vinculada a la escasez de chips, según estimaciones de la industria.

Por el lado positivo se sabe que varios productores de chips han anunciado planes para expandir la capacidad de fabriacaión, lo que podría aliviar la presión en la segunda mitad del 2022, o incluso antes si la demanda de algunos productos tecnológicos como los ordenadores personales disminuye. En 2020 se vendieron más de 300 millones de computadoras personales, según la firma de inteligencia de mercado IDC, frente a los 268 millones de 2019. Pero esos datos no son extrapolables hacia adelante ya que la situación no es la misma.

AMD, rival de Intel, es una de las empresas que ha buscado duplicar la fabricación y anunció en marzo que invertiría 20.000 millones de dólares en dos nuevas fábricas de chips en Arizona. Mientras TSMC, que es el mayor fabricante de semiconductores por contrato y trabaja con empresas como Marvell, también está construyendo una fábrica de $ 12 mil millones en Arizona. La compañía anunció en abril que invertiría $ 100 mil millones durante los próximos tres años para aumentar la capacidad de la fábrica.

Opel anunció recientemente que las operaciones en su planta de Eisenach en Alemania se detendrán hasta "principios de 2022", por la escasez global de microchips frena la producción, suspendiendo la construcción de la SUV Grandland y les ha dicho a los empleados que serán trasladados al trabajo a tiempo parcial. Mientras que el CEO de VW lamenta la pérdida de cuota de mercado debido al mismo problema.

Con todo esto en mente, ¿Cómo ha sido el desempeño de los fondos con posición en fabricantes de semiconductores?

Comenzando por analizar el comportamiento del índice PHLX Semiconductor Sector (SOX), índice ponderado por capitalización de la Bolsa de Filadelfia creado en 1993 y compuesto por las 30 empresas más grandes que participan en el diseño, fabricación, distribución y venta de semiconductores. En lo que va del 2021 el índice lleva una rentabilidad del 19,63,%, mientras que en 2020 subió 53,7% vs. 47,58% del tecnológico Nasdaq 100. Algunas de las razones que explican que este año la rentabilidad sea mejor que la alcanzada el año anterior es el hecho de que la inflación ha generado una rotación hacia valores más expuestos a una eventual alza de tipos de interés, como podría ser el sector bancario, claro ganador de dicho entorno, como ya lo comentamos en nuestra nota "Alza de tipos y favorables resultados bancarios => INVERTIR vía fondos", así como por la valoración que habían alcanzado ciertos valores tecnológicos.

Sin embargo, dados los favorables resultados empresariales de las empresas de semiconductores que se han dado a conocer recientemente generan la necesidad de volver a mirar el sector. En la nota de marzo proponíamos los siguientes fondos, mismos que revisitamos en esta ocasión:

  • BlackRock Technology Opportunities: fondo de tecnología que entre sus principales posiciones tiene acciones de fabricantes de semiconductores como ASML Holdingses, Marvel, entre otros. A pesar de haber alcanzado una rentabilidad superior al 80% en 2020, en este 2021 tan solo es de 8,8%, quedándose algo rezagado respecto al índice de referencia y a sus competidores, con lo que se ubica en el cuarto cuartil y percentil 81 por desempeño. Sin embargo, el fondo reporta un ratio de Sharpe de 1,25 vs. 0,98 de su categoría.
  • Invesco Dynamic Semiconductors ETF (PSI), este fondo cotizado también tiene 5 estrellas de Morningstar, y en lo que va del año alcanza una rentabilidad del 21,3%, situándose en el primer cuartil y percentil 11. En 2020 la rentabilidad fue menor que el anterior, alcanzando algo más del 56%. Es un ETF que invierte en compañías de menor capitalización bursátil, y una cartera concentrada de 30 posiciones. Entre sus mayores posiciones están Applied Materials, NXP Semiconductors, Lattice Semiconductors, Texas Instruments entre otros. Las 10 mayores posiciones representan el 46% del patrimonio que asciende a 699,5 millones de dólares.
  • Y por último, SPDR S&P Semiconductor ETF (XSD), que alcanza una rentabilidad en el año del 18,64%, mientras que en 2020 fue del 61,94%, situándose en ambos periodos  en el segundo cuartil y percentil 26 y 30 respectivamente. Su cartera está compuesta por 40 posiciones, donde las 10 mayores representan el 31% de los más de 1.000 millones de dólares de activos. Entre esas posiciones vemos a Marvell Technologies, Lattice Semiconductor, Semtech, Texas Instruments, Ambarella aunque ya no vemos entre los top 10 a Intel o NXP, como si aparecían en marzo.