El secretario general de CC.OO., Unai Sordo, ha defendido este jueves que asegurar que los salarios y las prestaciones sociales no pierdan poder adquisitivo "es justicia pero también eficacia económica", y ha augurado un escenario de "movilización creciente", que espera "ojalá diera como resultado poder llegar finalmente a un acuerdo por el empleo y la negociación colectiva".

En una entrevista concedida a Onda Vasca, recogida por Europa Press, el dirigente sindical ha defendido que la reforma laboral ha supuesto "un salto muy importante cualitativamente" en la contratación indefinida, de manera que ha pasado de suponer "entre siete y diez de cada 100 contratos que se firmaban cada mes hasta casi uno de cada dos" en el pasado mes de abril.

A su entender, mientras los datos de evolución de empleo general no tienen "una relación tan clara" con la legislación, sí se ha demostrado que "con esta regulación laboral y un incremento muy sustancial del SMI también se puede generar empleo" y, además, "a mayor velocidad".

"Se están rompiendo muchos tópicos, se puede salir de las crisis sin destruir tanto empleo, creando empleo más rápido con una regulación y una mucha mayor intervención de los recursos públicos como ha habido en la pandemia", ha manifestado Unai Sordo, "satisfecho porque todas estas medidas son producto del diálogo social" y "claramente de inspiración sindical".

Aunque la estabilidad de la contratación va "más que razonablemente bien", ha señalado que a partir de ahora, "cuando la economía decaiga o la ralentización e incluso la recesión se pueda dar, hay que tratar de evitar la destrucción masiva de puestos de trabajo", para lo que se han habilitado figuras como los ERTE que deberían ser "la alternativa a los despidos".

CCOO es también "partidario de meter mayor restricción" al uso del despido, una de las cuestiones que en la reforma laboral "se quedó pendiente", y en el futuro "causalizar mejor" para que "no se pueda despedir por cualquier cosa", tener procedimientos "mucho más garantistas" y "tapar ese boquete", ha apuntado su secretario general.

Sordo ha reiterado su reivindicación de recuperación de las cláusulas de revisión salarial en los convenios colectivos para que el diferencial entre lo pactado y la subida del IPC "acabe incorporándose a las tablas", algo a lo que CEOE "dijo que no" y, por ello, hay que "ir a un proceso de tensionamiento y movilización en la negociación de los convenios colectivos".

A su entender, "los salarios no pueden volver a ser los paganos de esta crisis" y no tienen "nada que ver" con la "espiral" de inflación, impulsada por el hecho de que la subida de precios energéticos ha ido "contaminando" a toda la economía y por que las empresas están "repercutiendo sus costes a precios". En este marco, ha insistido en que "no se pueden cronificar" las pérdidas de poder adquisitivo.

De momento, ha explicado, se va a plantear que la subida salarial inicial y garantías de revisión salarial se trasladen a las mesas de negociación de los convenios y "donde no se pueda hacer emprender un proceso de movilización y, llegado el caso, de huelgas".

Según ha advertido, "seguramente la inflación se modere" en la segunda parte del año pero los precios de los productos de "la cesta diaria" no van a volver a niveles del año 2020, sino que "probablemente se van a mantener o bajar muy poquito". En ese caso, ha añadido, "si los costes intermedios de las empresas disminuyen, van a mejorar los excedentes de las empresas" y esa mejora debe ir también a retribuir a los trabajadores.

Asimismo, ha remarcado que "cómo evolucione la demanda interna es fundamental para el crecimiento económico" y funcionará "mejor o peor en la medida en que los salarios y las prestaciones sociales no pierdan poder adquisitivo", con lo que, además de "justicia social", tiene "una lógica de eficacia económica". "Esto es justicia pero también eficacia", ha insistido.

En el escenario de "movilización creciente" que ha augurado, ha esperado que "ojalá diera como resultado poder llegar finalmente a un acuerdo por el empleo y la negociación colectiva que mande unas claves a todos convenios" para "salvaguardar" el poder adquisitivo y en "otras muchas claves" como la digitalización o el trabajo a distancia. "Si para ello hay que movilizarse, nos vamos a movilizar", ha asegurado.

SIN "MUCHO INCENTIVO"

Por otro lado, ha aludido a la reforma del Estatuto de los Trabajadores, precisando que lo que el Gobierno ha anunciado es la creación de un grupo de expertos pero "el marco de diálogo y la concertación social es otra cuestión".

De esta manera, ha insistido en que "para hablar de una reforma en profundidad del Estatuto de los Trabajadores pensando en el siglo XXI lo que tiene que abrirse es una mesa de diálogo social" que ha augurado "francamente compleja", entre otras cosas, porque CEOE no tiene "mucho incentivo" para esa negociación.

Finalmente, ha censurado la postura en Euskadi de ELA y LAB, de ausencia del diálogo social, y ha considerado que en estas dos últimas crisis ha quedado "particularmente al descubierto lo ineficaz de esa estrategia".