Un innovador estudio realizado por el grupo de Hematología del Instituto de Investigación Sanitaria de la Fundación Jiménez Díaz (IIS-FJD, UAM) muestra que la audición de música reduce significativamente la intensidad de los síntomas físicos y psicológicos en pacientes hospitalizados con leucemia mieloide aguda (LMA) de nuevo diagnóstico y en receptores de trasplante de médula ósea. El ensayo clínico aleatorizado y controlado, cuyos resultados han sido publicados en la prestigiosa revista Journal of Pain and Symptom Management, abre nuevos horizontes en la atención integral de estos pacientes.
El estudio, liderado por el Dr. Alberto Lázaro, especialista en Hematología y Hemoterapia e investigador principal del trabajo, junto a los doctores Pilar Llamas, Juan Manuel Alonso-jefa y especialista, respectivamente, del citado servicio en el hospital madrileño- y Daniel Láinez –investigador del grupo de hematología experimental del IIS-FJD, UAM-, se centró en evaluar cómo la música puede influir en el bienestar de los pacientes sometidos a quimioterapia intensiva, así como a un trasplante de médula ósea.
Para ello, este grupo investigador desarrolló la aplicación móvil GloMus, diseñada específicamente para ofrecer sesiones personalizadas de audición de música clásica. La música, cuidadosamente seleccionada por su tempo (velocidad) y tonalidad (mayor o menor) por el equipo investigador, ha estado dirigida a modificar el estado de ánimo de los pacientes. "Nuestro objetivo consistía en que los enfermos pudieran experimentar una transición emocional, pasando de la tristeza a la alegría, del nerviosismo a la calma, y del aburrimiento al entretenimiento mediante la audición de música a través de nuestra aplicación", explica el Dr. Lázaro.
Los resultados del estudio son prometedores: los pacientes que recibieron las sesiones experimentaron una reducción significativa de la carga sintomática, especialmente aquellos sometidos a trasplante autólogo y alogénico. Estas sesiones lograron no solo aliviar síntomas como el dolor, la fatiga o las náuseas, sino también mejorar el estado emocional de los pacientes, quienes reportaron sentirse más relajados, más animados y más entretenidos después de la intervención.
Sin embargo, la intervención musical no demostró tener un impacto significativo a medio plazo en la ansiedad, la depresión o la calidad de vida. “Estamos convencidos de que, si se prolongaran las sesiones durante un mayor periodo de tiempo, podríamos observar beneficios duraderos en la calidad de vida de los pacientes”, señala el Dr. Lázaro. Además, se observó que la música ayudaba a los pacientes a sobrellevar mejor el tiempo que permanecían hospitalizados, sugiriendo que podría convertirse en un complemento valioso para el tratamiento estándar en estos pacientes.
El impacto futuro de la música en el tratamiento oncológico
El estudio realizado por el IIS-FJD, UAM representa un avance significativo hacia la implementación de las intervenciones musicales en el tratamiento de pacientes oncológicos. Los hallazgos sugieren que la música podría ser una herramienta eficaz y accesible para mejorar el bienestar de los pacientes, reduciendo la carga sintomática y facilitando un estado emocional positivo durante la hospitalización.
Este enfoque innovador podría abrir nuevas puertas en la atención médica tanto para pacientes con neoplasias hematológicas como con otras muchas enfermedades, permitiendo que muchas personas puedan beneficiarse del poder terapéutico de la música.