Quick Gold, la franquicia especializada en la compra-venta de oro perteneciente al Grupo Otsu, está experimentando un considerable incremento en la actividad de sus establecimientos.

Su éxito se debe principalmente a un modelo de negocio muy cuidado, que proporciona una forma rápida y fácil de obtener beneficios económicos, de manera segura, fácil y rentable a través de la venta de oro y  otros metales preciosos en los establecimientos de la marca.

Otro de los factores que ha influido considerablemente en el buen funcionamiento de la Quick Gold es el fuerte incremento que ha experimentado el reciclaje de metales preciosos en los últimos años, convirtiéndose en la segunda fuente más importante para obtener oro, plata y platino.

El desequilibrio de la oferta es cada vez más significativo en los mercados de los metales preciosos a nivel internacional. Esta tendencia ha impulsado que exista un volumen de reciclaje del 23 al 25 por ciento de la oferta mundial de oro, un mercado que mueve aproximadamente 20 billones de dólares anuales. Si se añade la plata y el platino este mercado abarca cerca de 50 billones de dólares anuales.

Asimismo, hay que tener en cuenta que los precios del oro, los precios de la plata y el platino actualmente están por encima del doble de su precio en 2005, por lo que la demanda está superando con creces a la oferta.

Otro dato significativo es que la producción minera está disminuyendo, pues requiere una gran inversión en energía, capital y mano de obra, además de mucho tiempo.

Estos indicadores ponen de manifiesto el buen momento en el que se encuentra actualmente el sector de la compra-venta de oro, en el que Quick Gold ha logrado posicionarse como punto de referencia tras más de 16 años de actividad.

A lo largo de estos años ha configurado un modelo de negocio que ha sabido adaptarse a las necesidades de un mercado marcado por la crisis económica a nivel mundial, donde la compra-venta de oro y plata ha cobrado un papel protagonista.

Así, además de la compra-venta de oro, Quick Gold efectúa compra de diamantes, compra de plata, compra de  papeletas del Monte de Piedad y cambio de divisa, Asimismo realiza la gestión de empeños y envíos de dinero.

La compañía cuenta actualmente con 11 franquicias y para conseguir sus objetivos está desarrollando un ambicioso plan de expansión que le llevará a duplicar su cobertura nacional en los próximos meses, en base a una estrategia empresarial centrada en el sistema de franquicias.

La inversión necesaria para poner en funcionamiento una franquicia Quick Gold gira en torno a 70.000 euros en locales con un mínimo de 20 metros cuadrados ubicados en poblaciones con más de 100.000 habitantes, aunque realiza un estudio detallado para cada posible ubicación.

Nota al editor

Quick Gold es una franquicia española que nace en el año 2009 bajo el respaldo e iniciativa del Grupo Otsu, un holding familiar cuya constitución tiene lugar en 2006.

Desde sus inicios el grupo se ha especializado en el desarrollo de proyectos aprovechando las oportunidades que en cada momento brinda el mercado. Esta filosofía empresarial ha llevado a la compañía a posicionarse como una referencia en el mercado nacional con la puesta en funcionamiento de varias iniciativas empresariales que, además de Quick Gold, incluye las clínicas Dorsia, la empresa de abogados le Morne Brabant, las academias Schoola y el área de restauración Delifinder.

En constante crecimiento Grupo Otsu emplea en la actualidad a 300 personas y prevé facturar 40 millones de euros en el ejercicio 2011.