La Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), el Grupo de Estudio de la Infección en Pacientes Trasplantados (GESITRA) y la Red Española de Investigación en Patología Infecciosa (REIPI) han elaborado un documento de consenso para el abordaje de la gripe en portadores de trasplante de órgano sólido (TOS). La finalidad principal de este consenso es aportar recomendaciones aplicables a todos los pacientes portadores de TOS centrándose en el tratamiento y prevención de la gripe.
Al año se hacen 3.706 trasplantes de órganos en España con altas tasas de éxito, sin embargo, los receptores de TOS tienen un mayor riesgo de complicaciones y de mortalidad por infección por gripe que la población general, debido a su estado de inmunodepresión. De hecho en España aproximadamente el 20% de los trasplantados con gripe un sufre complicaciones debido a la misma.
Una de las recomendaciones que se desprenden del consenso es que los pacientes receptores de TOS se vacunen, entre otras enfermedades, frente a la gripe estacional todos los años ya que, en comparación con la población inmunocompetente, estas personas pueden presentar un mayor número de complicaciones y albergar el virus de la gripe durante periodos de tiempo más largos. La vacuna frente a la gripe se puede administrar un mes después del trasplante. Asimismo, los familiares o personas cercanas al paciente trasplantado, incluidos los niños, deberán vacunarse para evitar el contagio.
Por otro lado, si el profesional sanitario sospecha que el paciente pueda estar infectado por el virus de la gripe, deberá iniciar inmediatamente un tratamiento antivírico en cuanto se detecten los primeros síntomas como fiebre, dolor de cabeza, tos y malestar general.
Cabe destacar, además, la importancia del estado de salud del donante. Cuando éste sospecha o confirma tener una infección por gripe, debe hacerse la prueba microbiológica para descartar la posibilidad de infección, especialmente en los casos de trasplante de pulmón.