Era una de las soluciones más lógicas: encontrar un gran grupo empresarial que inyectase el dinero necesario en Abengoa y así evitar la quiebra. Primero se intentó con Gestamp – conglomerado industrial de la familia Gonvarri – y ahora, la banca acreedora estaría sondeando a algunas grandes corporaciones,
entre las que se encuentra Ferrovial.

Aunque Ferrovial ha comunicado que no ha recibido propuesta formal de los bancos acreedores, lo cierto es que es una de las compañías que mejor encaja pues Abengoa está bien posicionada en ingeniería en el sector del agua y la construcción de industrial, lo que le daría cierto alineamiento con rivales como ACS y Acciona.

Pero ¿está Ferrovial en disposición de actuar como salvador de Abengoa? Aunque está inmersa en una OPA en metálico por el 100% de la australiana Broadspectrum, la constructora tiene capacidad para abordar una eventual ampliación de capital de Abengoa pues su caja asciende a 2.498 millones de euros, a los que hay sumar dos líneas de crédito no dispuestas por otros 1.284 millones.

Los expertos, sin embargo, no creen que Ferrovial pueda actuar como salvador de la energética. Para empezar, dice Nicolás Fernández, de Banco Sabadell, porque no encaja en su política de inversión. Por su parte, Ramón Forcada, de Bankinter recuerda que lo primero que necesita saber la compañía que vaya a hacerse cargo de Abengoa es qué cifras son las reales y cómo asumir el coste de la deuda. “Me parecía sensato lo que dicen los acreedores bancarios que es que hace falta vender activos y saber cuál es la situación real de la compañía”. Siempre hemos dicho que las buenas compañías son las que controlan su endeudamiento y tienen márgenes altos. “No es el caso de Abengoa”.

Sin embargo, el tiempo apremia. Ayer la CNMV admitió a trámite la denuncia que el candidato de UPyD, Adrés Herzog, registro contra el consejo por ocultar información sobre el nivel real de su deuda y por una posible infracción de falta de transparencia. Decisión que llegaba después de que Moody´s rebajara la calificación de su filial en México hasta C tras el anuncio de impago de esa parte del negocio.