Ante la falta de resultados empresariales, Wall Street mantiene la tónica iniciada en la jornada de ayer y que ponía fin a cinco días consecutivos de ganancias. El mercado americano ha abierto en negativo, con la farmacéutica Pfizer con papel protagonista, y a la espera del dato de pedidos de fábrica
-el único para hoy- que se dará a conocer a las 16 horas de España.

Apertura de Wall Street en la que el único dato relevante han sido los resultados trimestrales de Pfizer que es el valor que más cae dentro del Dow Jones, un 1,3%. La mayor empresa farmacéutica del mundo ganó un 9,7% más, 2.220 millones de dólares, aunque sus ingresos cayeron un 0,4%. Con Pfizer encabezando las pérdidas y las tecnológicas en el lado de las ganancias. Compañías como AT&T y Boeing se anotan un repunte de algo más del 0,50%. El Dow Jones cae a esta hora ya un 0,22% y se queda en los 12.779 puntos.

El único dato positivo de la preapertura corría por cuenta de Mastercard, la empresa de tarjetas de crédito, que anunciaba un beneficio del 23% superior a cierre de marzo.

El tecnológico Nasdaq, por su parte, hace lo propio en el parqué americano y se deja un 0,37% hasta los 2.852 puntos. Mientras que el S&P 500 recorta un 0,35% y se coloca en los 1.355 puntos.

Lo cierto es que la tendencia bajista del mercado americano se debe más al puro letargo que provoca la falta de resultados empresariales que al 'efecto Bin Laden' que resuena muy a lo lejos para Wall Street. Europa se resiente a esta hora con la apertura a la baja de Estados Unidos y todas las bolsas sufren pequeños recortes en la recta final de sesión.

Esta situación deja al barril de crudo Texas en los 112 dólares y al par euro/dólar ligeramente por encima del 1,48 y continúa acercándose a mínimos de hace tres años. El oro, por su parte, se contiene en los 1.540 dólares la onza y deja para más adelante batir un nuevo récord histórico.