Total registró durante los últimos meses del año 2010 un beneficio neto ajustado de 2.560 millones de euros, lo que supone un 23% más si lo comparamos con datos del mismo período del año anterior.

Las ventas de la compañía crecieron un 11% hasta los 40.160 millones de euros. Datos que permitirán, tal y como anunciaba el consejero delegado de Total, Christophe de Margerie, un reparto de dividendos entre sus accionistas de 2,28 euros, el mismo que el pasado ejercicio, y se destinarán 20.000 millones de dólares a inversiones.
La subida del precio del crudo y el incremento de la producción en más de un 45% son para la petrolera las principales causas de la subida de beneficios.