Justo en plena digestión del nuevo mensaje conservador del presidente del Banco Central Europeo y a punto de desfilar por la pasarela de resultados con sus cuentas de 2018, dos entidades españolas entraban este viernes en fase de rebote: Santander y Liberbank.
La primera, el gigante del sector que cotiza en el IBEX 35, deja atrás un ciclo bajista en el que los filtros técnicos no otorgaban a sus acciones más que un 2 sobre 10. Su salto actual en el medio plazo le permite avanzar una posición, aunque sigue manteniendo un aspecto bastante deteriorado. La tendencia a largo plazo de Banco Santander sigue siendo bajista, con un volumen, tanto a largo como a medio plazo, decreciente.
Las acciones de Banco Santander acumulan una rentabilidad anual total con dividendo del 9,12% (frente a los descensos del 27% de 2018) y un ratio PER (precio/beneficio) actual de 8,33 veces. La entidad de Patricia Botín presenta sus cuentas correspondientes a 2018 el próximo miércoles 30 de enero.
Los expertos de Renta 4 esperan que Banco Santander confiese un beneficio neto cercano a 7.900 millones de euros, lo que supondría un 9% más que en 2017, dos puntos porcentuales más que el consenso de mercado, que estima que la entidad reduzca sus provisiones un 3% frente al 5% de tijera que prevé el panel expertos de Renta 4.
Unas previsiones en las que se consideran clave el impacto divisa, la generación de capital y el negocio en Reino Unido, dónde Banco Santander UK anunciaba esta misma semana un plan de cierre de sucursales que afectará a 1.200 empleados para adaptarse a la trasformación digital que está experimentando el sector y en la que el número de transacciones vía oficina continúa a la baja.
En el caso de Liberbak, sus acciones salen ahora de una fase de consolidación para entrar en un rebote, lo que le hace perder un punto de los 5 sobre 10 que le otorgaban los filtros técnicos. Su comportamiento bursátil durante el 2018 en el Mercado Continuo fue notablemente más positivo que la del resto del sector (al reducir su rendimiento negativo al 0,45%), mientras que en lo poco que llevamos de 2019 sus títulos suman un avance acumulado en bolsa del 2,36%.
A pesar del insuficiente otorgado en los indicadores técnicos, la entidad sigue manteniendo mejor aspecto que el valor de Banco Santander, al compatibilizar el momento total rápido positivo, con la tendencia alcista en el medio plazo y el rango de amplitud decreciente.
Presidido por Pedro Rivero desde 2014, Liberbank desfilará por la pasarela de resultados con las cifras de 2018 el próximo 31 de enero. Con la vista puesta en su fusión con Unicaja, los analistas de Renta4 calculan que sus ingresos en el cuarto trimestre del año, por encima de lo esperado, sea de 9 millones de euros. Muy por encima, de los 3 millones que espera el consenso. De esta manera la variación interanual frente a lo obtenido en el mismo período de 2017 sería de una caída del 22% frente al casi 73% en negativo que espera el consenso del mercado.
Ambos bancos siguen siendo preferencia de compra para la mayoría de casas de análisis que sigue Reuters. En concreto, Santander acumula 19 consejos de compra y 5 de mantener, de un total de 29. En el caso de Liberbank, no cuenta con ninguna recomendación de venta. De los 15 bróker que siguen el valor, 10 apuestan por la adquisición de sus acciones.
Respecto a su valoración, con un precio objetivo medio a doce meses de 0,55 euros Liberbank ve situado su potencial alcista cerca del 21%. En el caso de Banco Santander, sus acciones el margen es algo menor, del 19% al calcular un P.O. de 5.21 euros por acción.