- ¿Cómo ve el recorte de producción de petróleo anunciado por la OPEP+ y su posible impacto en las bolsas?

El impacto aunque sea prematuro es muy claro. El sectorial de petróleo y gas europeo este lunes subió un 3,99% y se puso en positivo en el acumulado del año cuando era uno de los peores del año. El recorte total acumulado desde mayo hasta finales de este ejercicio es de 3,66 millones de barriles diarios y deja claro el peso de la OPEP+ con Rusia teniendo un papel preponderante en su relación con Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Irak… Son malas noticias porque el precio del crudo ha repuntado por encima de los 85 dólares por barril y es curioso que el oro también se mantiene en precios elevados, por encima de los 1.980 dólares por onza tras servir de activo refugio durante la crisis bancaria.

La realidad en las bolsas es que los índices europeos se han ido, de nuevo, a máximos anuales cuando hace tan sólo nueve días teníamos algo que parecía un contagio de Deutsche Bank tras la caída de Credit Suisse y anteriormente de Silicon Valley Bank (SVB) o Signature Bank.

Por su parte, los resultados empresariales que se van conociendo siguen siendo satisfactorios en un entorno de desaceleración y en el que podemos calificarlos como el mejor de los escenarios posibles y en el que se está descontando un aterrizaje suave de la economía. Los últimos datos de inflación han sido claramente mejores de lo esperado, pero no olvidemos que esto ha sido por un efecto de base comparable, ya que la invasión de Ucrania se produjo el 24 de febrero y esto provocó un fuerte repunte de la inflación en marzo. Esa base comparable muy exigente de marzo de 2022 ha hecho que en EEUU el IPC se haya quedado en el 6%, eurozona un 6,9%, Alemania un 7,8%, Francia un 5,6% o España un 3,3%... Son datos bastante livianos, pero, ojo, si empezamos a tener de nuevo subidas de los precios energéticos, como estamos viendo desde ese shock por la decisión de la OPEP podríamos empezar otra vez a temblar respecto a los precios. Los inversores parece que de momento no están temblando y están teniendo una confianza, quizás sorprendente los mercados, porque algunos datos de confianza de mercado, empiezan a situarse en niveles, quizás, de extrema codicia y que podría generar tomas de beneficios.

- ¿Qué conclusiones saca de la crisis bancaria de marzo y cómo ve el sector financiero europeo en este momento?

La primera conclusión es que los bancos centrales actúan y actúan con rapidez. Silicon Valley Bank estuvo el jueves 9 de marzo en una situación difícil con un huida de depósitos por valor 42.000 millones de dólares, con un intento fallido de ampliación de capital de 1.800 millones de dólares y la Reserva Federal actuó ese mismo fin de semana. El SNB, el Banco Nacional Suizo, también actuó con celeridad ante la situación muy complicada de Credit Suisse, que hoy tiene juntas general de accionistas e incluso se prevé que Axel Lehmann, el presidente, lo tenga complicado para ser renovado en el puesto. El SNB ha dicho claramente que sin una fusión con UBS Group el banco estaría quebrado. Es decir, que la conclusión principal es que los bancos centrales tienen muy claro la época post-Lehman Brothers, el efecto contagio lo han erradicado con bastante contundencia. Es verdad que el Banco Central Europeo (BCE) no ha necesitado de esa contundencia, tan solo ha sido de palabra, porque no hemos tenido ningún banco de la Eurozona a priori en dificultades de liquidez. Pero rápidamente, la señora Christine Lagarde también expuso su compromiso de poner líneas de liquidez de emergencia si fueran necesarias, sobre todo cuando se estuvo especulando con dificultades por parte de Deutsche Bank. Así que la conclusión principal es que los bancos centrales claramente sacaron la artillería cuando fue necesario. Y lo curioso es que los bancos norteamericanos todavía están por debajo de los niveles de octubre del año pasado, pero los bancos europeos desde el 12 de octubre de 2022 han conseguido subidas espectaculares.

Los bancos perdieron parte de esta subida en marzo, pero han recuperado ya una parte de ese terreno perdido. Todavía hay ciertas dudas, pero en cualquier caso la solidez de los bancos europeos parece que no está en tela de juicio. Sorprende ese mejor comportamiento de los bancos europeos respecto a los estadounidenses, con extraordinarias subidas. Así que hay bastante optimismo, hay confianza en la actuación de los bancos centrales, que de momento tienen parte del camino allanado. Las subidas de tipos han sido fuertes y ahora las restricciones crediticias se deben más a que los bancos han dado un paso atrás en la expansión del crédito y eso puede suponer que la desaceleración o la recesión se acelere un poco y que no sean necesarias muchas más subidas de tipos, posiblemente 25 puntos básicos más y hayamos terminado la fase de política monetaria restrictiva para iniciar un recorte de tipos, que los swaps en Estados Unidos incluso hablan de 100 puntos básicos aquí a final de ejercicio.