El precio del petróleo se tomaba un descanso en un ambiente de incertidumbre y mirada bajista a Estados Unidos del que se contagia el Ibex con pérdidas del 2%. En este ambiente, el lunes mismo, las acciones de Repsol se lo tomaban con calma, con recogida de beneficios moderada. Y es que el efecto resultado le ha sentado tan bien al valor que le ha proyectado, con ganancias consecutivas que superaban el 12% a colocarse como el mejor valor de abril con avances que rozaban el 20% y en sus máximos anuales.
Natural descanso, por tanto, que le han llevado a las moderadas caídas de las últimas dos sesiones en las que recorta algo más de un 1,6% para el valor, pero que mantiene en un 18% sus ganancias del último mes y sin perder la cota de los 14 euros por acción. En lo que va de año, Repsol sube en el mercado un 38,4%. Eso sí todo ello ha cambiado esta misma mañana tras la decisión de Bruselas de incluir un embargo total al petróleo ruso a 6 meses vista, lo que eleva los precios del crudo y por tanto su vigor en el mercado.
También destaca la mayor presencia de BlackRock que se refuerza en su accionariado en el que, recordemos, no hay una mano fuerte más allá de la presencia de Amundi y Santander, con un 3,20 y un 3,82% de presencia indirecta en el valor, tras la salida de Sacyr. Así la mayor gestora del mundo se refrenda como el primer accionista de la compañía, con un 5,475% de presencia accionarial, siempre financiera, desde su 5,20% anterior, con efecto al 2 de mayo y asienta sus 12 años de presencia máxima en su capital.
Ahora, de nuevo mirando a un precio del crudo que los expertos señalan que seguirá subiendo si la tensión geopolítica permanece, aunque la oferta se ve presionada tanto por la inacción de la OPEP+ como también por la situación en China, que augura un menor consumo mundial. En medio, las petroleras en general en todo el mundo que marcan máximos del año. También la española que sigue presidiendo el Ibex con muy buenos resultados bajo el brazo.
Pero también recorrido en ciernes, aunque mucho más moderado tras las cuentas que lo augurado con anterioridad, con, incluso precios objetivos que rozaban los 19 euros por acción. De hecho, de los que se han pronunciado tras los buenos resultados, nos encontramos con el consejo de Barclays que contempla un precio objetivo para el valor en los 16 euros por acción, desde sus 14,50 anteriores, lo que le otorga un potencial alcista en el mercado del 14% desde su precio de cotización.
Mientras, desde Morgan Stanley, que le otorga un PO de 15,50 euros por acción con consejo de sobreponderar sus acciones, le ha colocado como una de las compañías con valoración atractiva y momentum, señala, en beneficios.
Sobre el resto, la cota para las acciones de Repsol, en una posible revalorización parece fijarse en esos 16 euros por acción de precio objetivo que también le atribuyen, como margen de mejora, tanto Jefferies como RBC.
Repsol, nos dice Néstor Borrás, analista independiente, “rompe la resistencia relevante de los 11,462 euros por acción, reactivando la secuencia de máximos y mínimos ascendentes que parte desde los 4,610 euros. Logra vulnerar los máximos de toda la historia, marcando un nuevo máximo en 14,075 euros por acción. Los niveles de soporte están situados en 11,462 euros y 10,256 euros. Luego, tiene soporte relevante en la directriz alcista principal en color fucsia, la media móvil simple de largo plazo y el soporte clave de los 9,370 euros”.
Repsol en gráfico diario con Rango de amplitud medio en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
En cuanto a los indicadores técnicos que elabora Estrategias de Inversión, Repsol obtiene, en modo alcista y con mejora de un punto, 9 de puntuación total, de los 10 posibles del valor. Con tendencia alcista a medio y largo plazo, momento total lento y rápido positivo y volumen de negocio que se muestra creciente, a medio y también a largo plazo. En su rango de amplitud es donde se encuentra lo más negativo del valor, porque la volatilidad es creciente en ambas vertientes para Repsol.
