Las acciones de BBVA retroceden hoy a media mañana un 2,25% hasta marcar 4,86 euros dentro de un IBEX 35 que a la misma hora baja un 0,57%. El valor se deja un 3,22% en lo que va de año, con la capitalización bursátil por debajo de los 32.400 millones de euros, convirtiéndose en el único banco del selectivo que sigue en negativo contabilizando este período.
Un comportamiento en el que tienen mucho que ver las dudas de los inversores sobre la exposición del banco a Turquía, una vez que el BBVA ha alcanzado ya una participación del 86% en Garanti.
Hoy la lira turca ha caído más allá de los 17,2 por dólar, deslizándose por cuarta sesión consecutiva hacia los mínimos históricos de diciembre, en medio de la preocupación por el aumento de la inflación, el incremento del déficit por cuenta corriente y la respuesta política de Ankara. La divisa ha perdido más del 23% de su valor frente a la moneda estadounidense este año, después de una caída del 44% el año pasado.
La crisis de la lira del pasado diciembre fue provocada por una serie de recortes poco ortodoxos de los tipos de interés llevados a cabo en consonancia con el plan económico del presidente Tayyip Erdogan, que da prioridad a la producción, las exportaciones, el crecimiento y los bajos costes de los préstamos.
Erdogan desencadenó el último brote de debilidad tras una reunión del gabinete el lunes, cuando dijo que Turquía no subiría los tipos, sino que seguiría recortándolos ante el alto coste de la vida.
Al pesimismo de los inversores sobre BBVA se suma hoy además un recorte en el precio objetivo por parte de JP Morgan. Los expertos del banco estadounidense sitúan la valoración de las acciones en 5,8 euros, frente a los 6 euros anteriores, si bien todavía más de un 15% por encima de su cotización actual.
