El programa reducirá las tasas de los préstamos públicos y ampliará las garantías de pago que el Gobierno ofrece mediante la Agencia de la Pequeña Empresa (SBA, en inglés) hasta el 90 por ciento del valor del préstamo, según revelaron fuentes gubernamentales durante el fin de semana.

Actualmente esas garantías cubren el 85 por ciento para créditos de menos de 150.000 dólares y el 75 por ciento para préstamos mayores.


Con la ampliación de la cobertura, el Gobierno pretende reducir el riesgo para los bancos de una posible suspensión de pagos por parte del empresario y animarles a prestar más.

Christina Romer, quien dirige el Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca, explicó el domingo que el mercado secundario de deuda de pequeñas empresas "virtualmente ha desaparecido".

Los bancos usaban ese mercado para vender los préstamos a inversores y con ese dinero extender más crédito.

Con su nuevo programa, el Gobierno pretende que ese mercado vuelva a funcionar, dijo Romer.