Este martes, las acciones de Melia Hotels han arrancado la sesión con subidas de más del 2%, pero a media tarde el valor sufre un durísimo castigo, con un desplome del 9,39% hasta los 6,96 euros. La cadena hotelera acumula una revalorización en lo que va de año de un 15%, que ha elevado su capitalización bursátil por encima de los 1.530 millones de euros.
Sin embargo, el rally podría haber ido demasiado lejos, de acuerdo con las estimaciones de los analistas. La casa de análisis de Stifel Nicolaus ha decidido hoy elevar el precio objetivo de las acciones de la hotelera de 7 a 7,50 euros, por debajo del cierre de ayer aunque por encima de la cotización actual dado el duro castigo.
No es una excepción, la media de analistas que siguen a Meliá le otorgan una recomendación de ‘comprar’, pero sitúan el precio objetivo en 7,76 euros, un 1% por encima del cierre de ayer.
Meliá sigue en pérdidas pero triplica sus ingresos
La compañía comunicó ayer tras el cierre del mercado unas pérdidas netas de 59,3 millones de euros en el primer trimestre, lo que representa una mejora del 54,7% con respecto a los datos del mismo periodo de 2021.
Los ingresos fueron de 271,4 millones de euros, más del triple que el año anterior (+255,5%), pero aún un 20,9% por debajo de la cifra de 2019. Los gastos de explotación se incrementaron un 94,1% con respecto a un año antes, hasta los 246 millones de euros. El resultado bruto de explotación (Ebitda) se situó en 22,7 millones de euros, 73,9 millones por encima del resultado negativo de 51,2 millones de euros de un año antes. Al cierre del periodo, la compañía disponía de una liquidez superior a los 310 millones de euros.
El consejero delegado y vicepresidente ejecutivo de Meliá Hotels International, Gabriel Escarrer, señaló que tras acusar el “fuerte impacto de la variante ómicron”, las reservas de la compañía experimentaron “incrementos notables semana tras semana, llegando a superar las ventas de la Semana Santa de 2019 y consolidando la franca recuperación del segmento vacacional en todos los destinos españoles”.
Meliá confía en que marzo de 2022 haya sido el punto de inflexión definitivo tras la Covid, que dé comienzo a una “sólida y acelerada” recuperación del sector hotelero, que va además acompañada de la reactivación de la movilidad aérea y otros actores como agencias y touroperadores.