Melia Hotels está viviendo un verano de recuperación. Con buena parte de sus hoteles abiertos, la primera firma del sector hotelero en España vuelve a resurgir, también en sus cuentas desde que el pasado mes de junio marcara Ebitda positivo, mientras que las reaperturas de sus hoteles se han producido basándose en la rentabilidad.
Un buen punto de partida que ha mejorado sensiblemente, tal y como ha reconocido su directiva a los analistas: con buena temporada de verano gracias al turismo nacional, que compensa en cierta manera al viajero por excelencia el británico y a la intermitencia de los alemanes, ante las restricciones. Un verano que se espera alargar hasta octubre, con buena evolución en la costa, aunque Canarias y Baleares notan la falta de turistas extranjeros y debilidad en el segmento urbano, que esperan se potencie en la parte final del año.
A esto hay que unir que las reservas de última hora, las que se producen con menos de tres semanas de antelación son las que imperan en el negocio, con precios similares ya a los preCovid, pero con niveles ocupación que llegan al rango del 60% frente al 80% de media habitual.
Un panorama en el que ha entrado en juego, en el ámbito negativo la persistencia del Covid-19 a pesar de los buenos augurios anteriores al verano por los niveles de vacunación. Sin embargo, la quinta ola ha quebrado los planes del levantamiento de muchas restricciones, en especial en lo relacionado con los viajes.
La variante Delta lo inunda todo y es, en este momento, en el que empieza a reducirse el nivel de contagios en España. Todo ello sin contar el fracaso de los vuelos transoceánicos con EEUU, donde los niveles de vacunación son muy inferiores, con avances en la mortalidad por Covid-19.
Todo ello sigue penalizando al valor que sigue recortando posiciones, un 3,6% en las últimas veinte jornadas cotizadas y pierde un 3,5% desde que comenzara el mes de septiembre. El valor permanece en equilibrio con el mercado con un ligero recorte que apenas supera el medio punto para Meliá Hotels.
Su presidente, Gabriel Escarrer destaca que la temporada turística ha ido de menos a más, con ciertos destinos que se han comportado mejor que otros. En el caso de los internacionales, México vuelve a niveles prepandemia, mientras en el lado contrario se ha colocado Cuba. República Dominicana sigue recuperando clientes al igual que China, como es habitual con turismo doméstico, aunque el resto de Asia tiene camino por recorrer.
Considera que en la comparación con 2019, sigue siendo este 2021 un año malo, pero que están estableciendo las bases para la recuperación y que, en 2022, en lo que esperan sea un entorno de mejora y de dejar atrás la pandemia, salgan reforzados, tratando de arañar cuota de mercado a otros destinos del Mediterráneo.
Los indicadores técnicos premium de Estrategias de Inversión nos muestran como Meliá Hotels se mueve en modo rebote en el mercado, con un ligero recorte en su revisión que le atribuye una puntuación total de 3 puntos sobre los 10 de puntuación total para el valor. En la parte positiva destaca la tendencia a medio plazo, que es alcista, así como el volumen a largo plazo que se presenta creciente.
Sin embargo, el resto de los indicadores que se mueven claramente a la baja, destacando especialmente la tendencia bajista a largo plazo, el momento total, que, en sus dos vertientes, lento y rápido es negativo para el valor, también el volumen de negocio, decreciente a largo plazo, así como la volatilidad, a medio y largo plazo que es creciente para el valor. La puntuación total se reduce a 3 de los 10 puntos posibles para Meliá Hotels.