Mucho le ha costado a Melia Hotels el puesto de privilegio que ocupa en estos momentos dentro del Ibex35. El segundo en concordia, solo superado por Banco Sabadell en lo que va de año, que, pone a las claras, que tras el boom inicial en este 2023 del sector turístico, sus resultados y expectativas de negocio y crecimiento afianzan su progresión en lo que llevamos de ejercicio.
Un valor que no solo se quedaba atrás, en especial por la divergencia del apoyo de los analistas, mixtos ante el recorrido como compañía y bursátil del valor, sino además por su presunta salida del Ibex ante su baja capitalización en el mercado para quedarse en el club de los grandes valores de la bolsa española.
Ahora mismo, sigue siendo con diferencia el farolillo rojo en esa materia. El segundo, Sacyr, le supera en más de 640 millones, pero desde que comenzó el ejercicio, ha recuperado unos 380 millones de euros en valor bursátil.
Otro debe que mantiene el valor es una posición corta por parte del fondo de Chicago de Ken Griffin Citadel Advisors, del 0,72% renovada al alza el pasado 3 de marzo que supone una inversión en posición corta sobre las acciones de Meliá Hotels de más de 12 millones de euros.
En su gráfica de cotización vemos que el valor se encuentra en zona de máximos anuales, afianzando sus ganancias tras las subidas de ayer, que le consolidan como el segundo mejor valor del Ibex con avances superiores al 40% a pesar de que su recorrido en las últimas 20 sesiones cotizadas alcanza un bagaje del 4%.
Pero ¿Qué dicen los analistas sobre el valor? Desde Deutsche Bank, mejoran de nuevo su expectativa sobre el valor con un precio objetivo de 5,90 euros desde los 5,6 anteriores. El problema es que este PO se encuentra ya muy lejos de su cotización, por lo que solo le otorga potencial negativo.
Algo que también ocurre desde Jefferies que vuelve a llamar la atención, como en ocasiones anteriores, sobre su nivel de endeudamiento, esos 2.673 millones de euros de deuda neta que mantiene, aunque mejora su expectativa, desde los 4,70 euros anteriores a los actuales 5,80 por acción su PO, también con potencial negativo.
Nada que ver con el consejo de sobreponderar y su precio objetivo de 7,5 euros por acción de Renta 4, que presenta una posible mejora en su recorrido alcista del 17% sobre su cotización actual tras los resultados y las expectativas con su crecimiento a doble dígito frente a 2019. Con Bankinter pasa lo mismo con precio objetivo de 6,19 euros por acción y recomendación de compra.
Para el analista de mercados financieros de Estrategias de Inversión, José Antonio González, en Meliá Hotels “se activan señales de venta o cortes descendentes en el MACD diario, cuyas lecturas parten de sobrecompra acumulada que, junto con un enfriamiento en la actividad de contratación, permiten plantear correcciones en el corto plazo si perfora el soporte de los 5,865€ por acción. En este sentido, se abre una potencial corrección o throwback al área de anterior resistencia, ahora soporte, identificada en torno a los 5,475 / 5,195€ por acción”.
Meliá Hotels en gráfico semanal (Izq.) y diario (Dcha.) con Rango de amplitud medio en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
En su operativa técnica, además, si miramos a los Indicadores de Fuerza Premium que elabora Estrategias de Inversión vemos que pasa de débil a fuerte, tanto a medio como a largo plazo, con operativa en ruptura de resistencias y compra en soportes, mientras que el riesgo latente es la acumulación de excesos y de figuras bajistas para el valor.
El pasado viernes, el estratega de mercados Ramón Bermejo indicaba en el caso de Meliá Hotels que “en la serie diaria, el hecho de tener caída con disminución de volumen y no cerrar en la zona de mínimos, es un elemento positivo. Al cierre de ayer describimos un patrón asimilable a un martillo, vigilamos que validemos la figura vulnerando su máximo en 6,335 euros y podamos tener dos sesiones de recuperación”.