En una nota para sus clientes, el experto asegura que “los bancos españoles han perdido el impulso del que disfrutaron en los primeros meses del año debido a que las perspectivas de normalización de los tipos se han enfriando gradualmente y por el ruido político del conflicto en Cataluña”, explican. Entre tanto, las expectativas del Euribor han continuado decepcionando a los inversores, afirma el experto.

Todo esto provocará que los resultados del tercer trimestre no vayan a ser nada ‘excitantes’, afirma Gonzalo López. En general esperan una rebaja del margen de intermediación del 3% con respecto al trimestre español, debido a los ajustes de las hipotecas por las caídas del Euribor y a una menor generación de créditos hipotecarios –por razones estacionales-.

Afirma también el experto que “en algunos nombres específicos, la eliminación del suelo de las hipotecas sigue afectando a sus ingresos”. Se refiere en especial a Unicaja y Liberbank.  También esperan una caída de las comisiones del 5% con respecto al trimestre anterior.

La mirada puesta en el cuarto trimestre del año

El analista cree que serán las cifras del cuarto trimestre las que realmente van a ser interesantes. Explica que en ellas se tendrá en cuenta las decisiones de política monetaria del BCE –se espera que se anuncie el tapering el próximo miércoles- y de la FED. “También se podrá observar el impacto real que el conflicto catalán habrá tenido sobre los bancos”, explica el experto.

Además, recuerda que será el trimestre anterior a que se impongan cambios regulatorios internacionales y los cuartos test de estrés europeos. En la firma consideran que las estimaciones de mejora de los márgenes de intermediación para los bancos españoles son demasiado exigentes.

Por último, aseguran que el volumen de activos (NPA), los activos tóxicos, sigue siendo demasiado alto para los bancos domésticos y que “al ritmo actual les va a llevar demasiado tiempo rebajarlo”.

El experto señala que “en este contexto, pensamos que las estrategias pasivas de venta para aprovecharse de la recuperación del mercado inmobiliario no es sostenible”. Considera que algunas firmas requerirán más provisiones.