Si hay un valor damnificado en este ejercicio bursátil, ese es Solaria. En un selectivo que lleva seis semanas seguidas subiendo, algo que no lograba los inicios de 2018, con avances a doble dígito y en el que apenas un puñado de valores que caben en los dedos de una mano pierden posiciones, la compañía que construye parques fotovoltaicos, es el más perjudicado.
Y además, paradójicamente del sector más de moda y que mejores réditos puede dar en un horizonte a medio y largo plazo. Representa un exponente más que claro de la industria de la sostenibilidad, donde mayor cantidad de dinero de las ayudas europeas se destinará, en torno a 1 de cada 4, el más intensivo en capital también en el horizonte de las nuevas infraestructuras en Estados Unidos al que dedicará la Administración Biden 1,9 billones de dólares.
Todo eso es verdad, pero también que los inversores siguen considerando cara para su pipeline a la que fuera la joya de la corona de 2020, y que también esa paradoja ligada a la pandemia que nos inunda ha convertido al farolillo rojo del Ibex 35, en el líder anual en 2021.
Por tanto, tenemos a Solaria con caídas anuales del 30,6% a cierre de ayer, a pesar de que, en las últimas 10 sesiones, el saldo del valor es claramente positivo, con avances superiores al 10%. Sin embargo, en el mercado no ha gustado el retraso de la presentación de sus cuentas hasta el 31 de mayo.
Un valor que también se ve lastrado por sus posiciones cortas. No es un buen augurio que ODEY AM haya actualizado, el pasado 17 de mayo, su porcentaje bajista al alza sobre el valor. Ha pasado al 1,77% desde el 1,69% de tres días antes. Mientras el día 13 de mayo, el británico Helikon Investment, ya casi un clásico corto en las fotovoltaicas reducía hasta el 1,12% desde el 1,21% anterior su posición. En total, un 2,89% de su capital presionando en negativo, aunque ya se aleja de esos porcentajes anteriores que llegaron a superar el 6% en sus peores momentos del ejercicio.
En su gráfica de cotización vemos como el recorte de las últimas 20 sesiones, frente a las 10 últimas si se salda con recortes a doble dígito, del 11,3% y sus recortes anuales superan en un 10% a los de su inmediato perseguidor, Siemens Gamesa.
Desde el punto de vista técnico, el analista técnico de Ei, José Antonio González destaca que Solaria “extiende en tiempo y forma el proceso correctivo de medio plazo, con la reciente vulneración de zonas de soporte, respaldada por incrementos en la actividad de contratación y cruce bajista por parte de sus medias móviles de medio y largo plazo, un movimiento que le permite actualizar objetivos a la baja hasta la zona de los 13,06 euros por acción si perfora antes el reciente mínimo de los 14,43 euros por acción”.
Solaria en gráfico diario con Rango de amplitud medio en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación
Mientras, Siemens-Gamesa es el segundo en discordia de un Ibex 35 que se aleja en su mayoría de las caídas. En especial de las fuertes caídas, que protagonizan estas dos empresas. Hay un abismo del 18,7% con su más inmediato seguidor a la baja, ACS que recorta un 2,9% en el año. Y el gigante de aerogeneradores ha sido el último en llegar a esta situación y con esta cuantía en sus pérdidas.
De hecho, en su gráfica de cotización comprobamos como Siemens Gamesa, cede desde que comenzara el ejercicio un 21,6% con una tendencia que se sostiene y de qué forma en las últimas 20 sesiones cotizadas del valor, en las que recorta un 20,79%.
Dos razones, dos, son las que, a decir de los expertos, mantienen al valor en esa situación de caídas. La primera viene de la nueva, enésima ya, revisión de su guidance. Algo que pone muy nervioso al dinero, que ve como no se van a cumplir las expectativas marcadas por la compañía y que ya cotizan en su precio. Su recorte de los ingresos hasta un máximo de 10.500 millones, frente a los hasta 11.200 cifrados inicialmente no han gustado al mercado. Hay retrasos en la entrada de pedidos y en la ejecución de proyectos que lo propician.
La segunda pasaba incluso por la suspensión del valor. El alivio con el que los inversores premiaron en su vuelta al mercado que la matriz no pensara excluir al valor de cotización, no exime de que la compañía vuelva a dar la vuelta a su estrategia para hacer de la eólica marina, la más rentable pero también la más intensiva en capital, su eje en el futuro. De momento no se producirá, pero es un tema que sí ha estado sobre la mesa, como adelantaba expansión entre la cúpula de la compañía.
Desde el punto de vista técnico, José Antonio González, analista de Ei señala que Siemens Gamesa “comienza a perfilar argumentos de giro en favor de las compras, gracias al repunte en la actividad de contratación, divergencias alcistas y apoyo en la directriz creciente de fondo que nos deja un mínimo con el que trabajar en los 24,67 euros por acción. En este sentido, el próximo objetivo se establece a la altura de sus medias móviles de medio y largo plazo, cuya superación, permitiría pensar en atacar los 33,76 / 32,97 euros por acción”.
Siemens Gamesa en gráfico diario con Rango de amplitud medio en porcentaje, oscilador MACD y volumen de contratación