La revisión al alza de las perspectivas para la banca europea y la posible inyección de capital en Washington Mutual sirvieron de apoyo en la última jornada, pero no este martes. De olvidarse de que una “monoline” está en apuros –tras rebajarse el rating a MBIA- y dejarse de lado los malos augurios (el BBVA asegura que el frenazo económico no tocará fondo hasta 2009, mientras que el Banco de España no ve fondo en la crisis inmobiaria), la bolsa española “regresa” a la realidad. Los inversores recogen beneficios una vez comprobado que la carrerilla cogida no sirve para saltar la resistencia que el Ibex 35 tiene en los 14.000 puntos. Eso sí, la bolsa española se encuentra ya más de un 13 por encima de sus mínimos del mes de enero, pese a que la palabra crisis es la más repetida en todos los ámbitos. Así las cosas, la renta variable de nuestro país se repliega para intentar el salto más adelante. Reposa por el cansancio, por los resultados por debajo de las previsiones de Alcoa y por el aviso de que no cumplirá con beneficios de AMD. Y los inversores hacen caja, sobre todo, en el sector bancario.
Mal día para los bancosLos descensos más abultados en los primeros movimientos del día son para el sector bancario. El más castigado es el Santander
, que cede un 1,11 por ciento, seguido de Bankinter (-1,08 por ciento). Entidades como Popular y BBVA bajan en torno a un 0,6 por ciento. Además de los bancos, títulos como Gamesa, Iberdrola Renovables o Iberia se colocan entre los peores del selectivo del continuo, al ceder más de un 1 por ciento en ambos casos. La tercera tras publicarse que pararía la fusión Clickair-Vueling si pone en peligro la compra de Spanair. Telefónica pierde terreno, un 0,5 por ciento, -después de que Societé Generale haya recortado el precio objetivo de la operadora hasta los 22 euros por acción desde los 25,8 euros anteriores-, mientras que Repsol cede un 0,65 por ciento. Entre las constructoras, ACS y Sacyr Vallehermoso recortan un 0,9 por ciento, la segunda en el día en el que abona hoy entre sus accionistas un dividendo bruto de 0,150 euros por título con cargo a los resultados de 2007. Por su parte, Ferrovial se deja un 0,6 por ciento, tras publicarse que negocia el traspaso de inmuebles a Prologis y busca una mejora de la calificación de la deuda de su filial BAA para reducir los costes financieros. Idéntico porcentaje al que cede Iberdrola, que ha pedido a un juzgado de Bilbao una sanción de hasta 79 millones de euros por no aclarar sus planes sobre la española.