Fitch ha decidido rebajar su posición respecto a los ratings de los bancos españoles ante el potencial impacto de la situación provocada por el Covid-19 en España. Entre ellos, ha cambiado su perspectiva de estable a negativa sobre Santander y Caixabank, mientras que ha colocado en vigilancia negativa a BBVA, Sabadell o Bankia.
La agencia de calificación ha destacado que, aunque las implicaciones económicas y financieras en el mercado todavía no están claras, el sector bancario español puede verse gravemente afectado, entre otros, debido a los riesgos para su entorno operativo y a los perfiles crediticios de las entidades, sesgados a la baja. En esta línea, Fitch augura un deterioro importante en las perspectivas del PIB para la Eurozona.
Las medidas tomadas por el gobierno español durante las últimas semanas han afectado de manera colateral al sector bancario, tanto positiva como negativamente. Por ejemplo, las ayudas a los préstamos concedidos a las pymes y empresas respaldarán la calidad de los activos de los bancos, mientras que las moratorias en el pago de las hipotecas tendrán implicaciones negativas. En todo caso, Fitch considera que, gracias a las ayudas de la Unión Europea, el impacto financiero en las entidades bancarias se verá finalmente minimizado.
A pesar de ello, la agencia calificadora destaca como posibilidad que la calidad de los activos de los bancos españoles se debilite, así como su volumen de negocio, motivos por los cuales han decidido rebajar sus perspectivas. Además, desde Fitch consideran que la volatilidad presente en los mercados puede provocar más pérdidas de valoración en las tenencias de valores de los bancos, y perjudique a las emisiones de deuda para financiarlos. En este caso, se trata de una perspectiva más a largo que a corto plazo.
Al margen de esta rebaja en sus ratings, Fitch ha querido destacar la solidez de los bancos españoles a lo largo de los últimos años, ya que han mejorado su capitalización y capacidad operativa.
Rebaja la perspectiva de Santander y Caixabank a negativa
Hablando de entidades concretas, Fitch ha decidido cambiar su perspectiva sobre Santander a negativa desde estable, ya que observan un riesgo a medio plazo para las calificaciones de la entidad, debido al posible impacto del Covid-19. A pesar de la solidez de Banco Santander, la pandemia supone “un desafío importante” que podría repercutir en las ganancias y la calidad de los activos.
Respecto a la matriz de créditos al consumidor de Banco Santander, Santander Consumer Finance, Fitch también ha rebajado su perspectiva a negativa, ya que la situación actual representa un riesgo a corto plazo debido a su matiz cíclico.
La perspectiva respecto aCaixabank también ha sido cambiada a negativa desde estable, en este caso porque las consecuencias de la pandemia pueden suponer riesgos a medio plazo para las calificaciones asignadas a la entidad. Como aspectos positivos, el banco posee una franquicia de seguros que es líder a nivel nacional, así como un modelo de negocio diversificado que le proporciona margen para proteger sus ganancias y sus reservas de capital. Por otro lado, la entidad se encuentra más expuesta a los riesgos del mercado de inversiones de capital, lo que puede tener un impacto negativo debido a la situación actual.
BBVA, Sabadell y Bankia, en vigilancia negativa
La agencia de calificación ha puesto en vigilancia negativa a BBVA debido a que las consecuencias de la pandemia en España suponen un riesgo a corto plazo para las calificaciones asignadas, ya que la entidad deberá hacer frente a las complicaciones actuales tanto en su país de origen como en los otros mercados emergentes en los que está presente.
Las calificaciones de Banco Sabadell también han sido puestas en vigilancia negativa. Desde Fitch explican que la entidad puede verse envuelta en un riesgo mayor debido a su exposición significativa en el segmento de las Pymes, que se está viendo afectado dada la situación actual, aunque las medidas tomadas por el gobierno español podrían aliviar parte de la presión. Por otro lado, destacan la poca rentabilidad de sus negocios en Reino Unido, lo que puede provocar un incremento del riesgo.
Además, Fitch sitúa a Bankia en vigilancia negativa, ya que la entidad bancaria se encuentra en relativa debilidad, causada por sus ingresos poco diversificados y flexibles, lo que supone que se encuentre en una posición más débil respecto a otros bancos españoles. Sin embargo, Bankia se beneficia de sus reservas de capital y de operaciones como la suspensión de su dividendo complementario.
Esta revisión de las calificaciones ha llevado a los bancos españoles a acumular caídas que lastran hoy el ritmo del Ibex 35, con lo que se convierten en el peor sector del selectivo español. En concreto, Santander cae en la jornada de hoy en torno al 6%, al igual que Caixabank, mientras que BBVA baja más de un 4%, Sabadell lo hace en torno a un 5%, y Bankia acumula caídas del 3%.
