Los analistas de diferentes casas de inversión creen que las probabilidades de que se presente una contraoferta por Scottish Power son limitadas y llaman la atención sobre el carácter amistoso de la propuesta de compra de Iberdrola (que valora el grupo británico en 11.600 millones de libras). Los expertos destacan los beneficios fiscales que conlleva la operación para la eléctrica vasca y que no conseguirían eventuales competidores.