Las razones de esta restricción descansan, según Carbó, en un problema de confianza en los mercados financieros internacionales originado por el estallido de la crisis de las hipotecas "subprime" o de alto riesgo en estados Unidos que ha incrementado el coste de la financiación interbancaria. Además, en el caso de España existe un elemento particular derivado de la caída de la actividad en el sector de la construcción y la disminución del valor de los activos inmobiliarios.Para el profesor Carbó, la restricción del crédito, que no se limita al ámbito financiero, sino que se traslada al entorno empresarial y a las familias, lo que produce a su vez una caída en el consumo privado, es una "realidad innegable" en España desde agosto de 2007. Así, el crecimiento mensual del crédito al sector privado fue en 2006 del 1,9%, frente al 1,7% de 2007. En lo que va de año, la tasa ha pasado del 1,3% de febrero al 1,1% de marzo, últimos datos disponibles.Según el profesor Carbó,
el descenso no es "alarmante" pero sí significativo y, según sus estimaciones, en 2008 la concesión de créditos podría ser el 25 o el 30% inferior de la que fue en 2007. Además, la tendencia a la baja viene acompañada por el aumento de la dudosidad del crédito de las entidades bancarias, que ha pasado del 1,1% en 2006 al 2,3% en 2007. El aumento de la dudosidad podría repercutir así en un incremento de la morosidad hasta niveles entre el 2 y el 3%.