Según el estudio, este hecho es una muestra de los diferentes comportamientos con que los inversores de distintas partes del mundo afrontan la escasez de crédito, según se encuentren en mercados desarrollados o en economías emergentes.Así, mientras casi la mitad de los inversores de China, India y los Emiratos Arabes se muestran proclives a incrementar el riesgo en su cartera de inversión, los inversores de países como España, Reino Unido o Italia son más cautos, ya que apenas una cuarta parte de los inversores encuestados de estos países se plantean aumentar el riesgo en sus inversiones.Además, en los países desarrollados, más de la mitad de los inversores afirman que piensan aumentar la disposición de dinero en efectivo para contrarrestar la "pobre" evolución de los mercados, una medida que, según los expertos, "no es la más beneficiosa a largo plazo".En este tipo de reacciones a la crisis, la edad y la experiencia juegan un factor fundamental según el informe, ya que mientras el 51% de los inversores menores de 50 años prevén aumentar su asignación a efectivo, esta cifra desciende al 41% entre los mayores de 50 años.Además, el estudio indica que Internet se ha convertido en una importante fuente de información para los inversores con grandes patrimonios, ya que el 75% de los entrevistados asegura que utiliza la Red para investigar y recopilar información comercial y financiera.Para elaborar el estudio, la EIU entrevistó a más de 2.300 inversores en diferentes países de todo el mundo, con especial incidencia en los procedentes de Estados Unidos, India, Reino Unido, España, Singapur, Hong Kong, Canadá, Suiza, Emiratos Arabes Unido y Mónaco.