London Stock Exchange (LSE) informó mediante un comunicado que el acuerdo consistirá en crear una empresa comercial paneuropea a través de la unión de Turquoise
, que se creó hace poco más de un año por iniciativa de nueve grandes bancos de inversiones para intentar que la Bolsa de Londres recortase sus tarifas y mejorase su servicio; con Baikal Global Limited, filial de LSE. Ésta última será la propietaria del 60% del capital. Sin embargo, el 40% restante quedará en manos del resto de accionistas de Turquoise entre los que se encuentran grandes de la banca como UBS, Morgan Stanley o Goldman Sachs entre otros, todos clientes de LSE.


Esta noticia parece haber animado a Bolsas y Mercados españoles (BME), que repunta más de un punto y medio porcentual. Ignacio Cantos, director de inversiones de Atlas Capital, considera que “esta operación podría beneficiar a BME”, ya que, la concentración implica que “se reduzca la competencia”. Además, el experto vaticina que “este proceso de concentración se extenderá al resto de mercados y BME es un gran candidato para este tipo de operaciones”. Por su parte, Alejandro Varela, gestor de fondos de Renta 4, sostiene que “esta noticia no afectará a los índices europeos”, porque “su incidencia es mínima y está más que descontada”.

Sin embargo, la bolsa de Londres no se conforma con dar este paso, sino que también tiene la intención de incrementar la participación en el capital de la nueva empresa con la venta del 9% del capital social emitido a otras partes interesadas. Sin embargo, LSE ha declarado conservará su participación mayoritaria.

En dicho comunicado también se informaba que la sede será neutral pero que se conservará el nombre de Turquoise. La nueva empresa estará abierta a todos los mercados activos europeos y su principal objetivo será ganarse la confianza de los reguladores de la región. Según la propia LSE, esta unión contará con muy buenas referencias porque será construida sobre las plataformas alternativas de Turquoise y aprovechará la gama de productos innovadores de Baikal. Por su parte, Cantos considera que esta nueva compañía beneficiará tanto a LSE como a Turquoise porque “les permitirá recortar gastos”.

Se espera que la operación concluya aproximadamente en febrero de 2010. Se materializará a través de la compra de los intereses de los accionistas actuales de Turquoise por parte de una nueva empresa subsidiaria de LSE. A cambio, dichos accionistas recibirán un 40% del capital de la nueva compañía, que se convertirá en la sociedad de cartera de Baikal.

La presidencia de la nueva sociedad resultante la ocupará el consejero delegado de LSE, Xavier Rolet, quién se mostró satisfecho por las futuras alianzas que se darán con sus principales clientes. "Creemos que ahora estamos bien posicionados para ser un agente de cambio y hacernos con una parte del crecimiento potencial de mercado", declaró.

El consejero delegado de Turquoise, Eli Lederman, también mostró su optimismo con respecto a esta nueva unión, la cuál considera un gran paso para el desarrollo de la compañía, que en sus primeros 18 meses de operaciones ha conseguido hacerse un hueco en el mercado. Sin embargo, Varela considera que la cuota de esta plataforma “es bastante reducida”.