Cierto es que el verano ha resultado más que positivo para el sector turístico español en cuanto a la facturación y negocio se refiere de empresas de hostelería, compañías proveedoras de soluciones tecnológicas para la industria de los viajes, hoteleras y aerolíneas. 

Sin embargo, si nos fijamos en la marcha en bolsa de una de las principales empresas de nuestro país de este último apartado, el de la aviación, la cotización de IAG no ha sido de las que mejor lo han hecho en nuestro Ibex 35 estos últimos meses.

Es verdad que IAG lograba marcar máximos anuales el pasado 31 de julio, cuando cerraba al borde de los ansiados 2 euros, en 1,992, pero también lo es que el período de estío no ha servido para que la aerolínea engrose su acumulado en el Ibex 35. En concreto, las acciones de IAG ganan un 32,5% en este 2023 en bolsa -siendo el cuarto valor más alcista del selectivo español-, pero si tenemos en cuenta los números desde el pasado 21 de junio hasta hoy, sólo han servido para restar a su cotización un 4,3%. 

Y este miércoles, la aerolínea vuelve a reiterar sus números rojos. La matriz de Iberia es en estos momentos el farolillo rojo del Ibex 35, con sus acciones recortando más de un 1,5% en la bolsa hoy hasta los 1,84 euros

Con ello, son muchos los inversores que se preguntan qué hacer con las acciones de IAG (Iberia). En este sentido, la semana pasada, Raúl Calle, analista de iBroker, explicaba que “pese a la corrección de agosto, en el medio plazo se puede dibujar una tendencia alcista de medio y largo plazo en IAG”. De hecho, el consenso otorga al valor del Ibex una recomendación media de ‘comprar’ y un precio objetivo de 2,46 euros que se traduce en un potencial alcista de un 32,9% a doce meses (medio plazo). 

Sin embargo, la recomendación a corto plazo, al menos la de de hoy, es la de cautela, si tenemos en cuenta los comentarios de Calle de la semana pasada. "Todos aquellos inversores que estén dentro de IAG tienen que ver que si continúa la tendencia alcista, dejar correr las ganancias y, si hay corrección de medio plazo, vigilar el soporte de los 1.85 euros. Romper el soporte con contundencia supondría ver precios similares a los que hemos tenido a finales de julio, en los 1,75 euros”.