Así lo ha asegurado a Efe el portavoz de esta organización de consumidores, Rubén Sánchez, quien ha anunciado que Facua presentará en los próximos días sendas denuncias ante el Instituto Nacional de Consumo, dependiente del Ministerio de Sanidad y Consumo; la Comunidad de Madrid, donde tiene sede Telefónica, y la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones."Se trata de una práctica ilegal cobrar un servicio que los clientes nunca han pedido ni activado", ha destacado Sánchez, quien ha añadido que Telefónica "se saca de la manga" este cobro de 0,58 euros al mes por una información, la identidad de la llamada, que desde el año 2001 era gratuita.Desde el 10 de julio ya se cobraba a los cerca de dos millones de clientes que no tenían contratado un paquete de servicios (Dúo o Trío con ADSL) o tarifa plana de voz esta identificación de llamadas.Por ello, Facua también reclama la devolución en la factura de este importe a los clientes a los que ya se ha cobrado el servicio, que supone, sostiene, una subida del 3,6% de media en la cuota mensual del usuario.Sánchez ha subrayado que Telefónica "nunca ha notificado a sus clientes que la identificación de llamadas era un servicio añadido", por lo que se entiende que esta información "está dentro de los servicios que ofrece Telefónica, como el hecho de bajarle el volumen al teléfono o que en los móviles se identifique la llamada entrante".La operadora ya ha empezado a informar en las facturas a todos sus clientes del recargo por utilización del servicio, dentro del "compromiso de la empresa de comunicar los cambios con antelación".En este sentido, Sánchez considera que para darse de baja de un servicio, antes el cliente tiene que estar dado de alta, situación que en este caso no se produce.El sistema de identificación de llamadas se introdujo primero en 1999 en el contestador automático del operador por un precio de 1.000 pesetas (6 euros) de alta, más 100 pesetas mensuales (0,60 céntimos).Posteriormente, en el mes de octubre de ese mismo año se empezó a ofrecer en el teléfono fijo por 200 pesetas al mes (1,2 euros), cuando se cambió el tradicional modelo de terminal "Forma", que no disponía de pantalla, por el "Domo", que sí la tiene.Telefónica explica que la identificación de llamadas pasó a ser gratuita en 2001 como producto promocional, de tal forma que "antes o después" tenía que terminar la oferta.