Desde la patronal se criticó también la aparente falta de progreso de otras iniciativas del Ejecutivo laborista de Gordon Brown para reactivar la economía, como el multimillonario paquete de ayuda a la industria del automóvil y sus empresas subsidiarias.

Especialmente seria entre los empresarios es la preocupación sobre la falta de seguro de pago de los créditos, que cubre a los proveedores ante los eventuales impagos de los compradores, lo que ha obligado al Banco de Inglaterra a intervenir.

Dice el diario que el jefe contable del banco emisor ha convocado ya varias reuniones con las empresas y con las aseguradoras de crédito para que sigan colaborando y trabajando juntas.

La semana pasada Brown aseguró que el plan de garantía de crédito era una prueba de los esfuerzos del Ejecutivo para apoyar a las empresas y cifró en 60.000 "las compañías que ya se han beneficiado" de las iniciativas adoptadas para hacer frente a la recesión.

Pero el FT considera que esa cifra de 60.000 empresas corresponde a las que se han acogido al plan que permite prorrogar el pago de impuestos y no al programa de garantía de crédito.

Phil Olford, del Foro de Empresas Privadas, dijo que las iniciativas del Gobierno "están lejos de ser suficientes" y afirmó que "las medidas del Gobierno para financiar los préstamos bancarios a las pequeñas empresas no están arrojando resultados".

El FT añade que el ministerio de Empresa rechazó facilitar cifras sobre cuántas empresas se han beneficiado o sobre cuánto dinero se ha prestado hasta la fecha y que, entre los bancos, solo el Barclays informa de la concesión de créditos por valor de 12 millones.

"Los préstamos se dan con cuentagotas", afirma Stephen Alambritis, quien argumenta que "el concepto de prestar ayuda a los bancos para que éstos ayuden a la economía no está funcionando".