En cuanto a la rentabilidad, los únicos productos que lograron una revalorización positiva durante el mes de mayo fueron los de renta fija a largo plazo y los inmobiliarios, con un 1% y un 2%, respectivamente. Por el contrario, los más castigados fueron los de renta variable (-9,3%), seguidos de inversión libre (-3,6%) y mixtos de renta variable (-3%). Por su parte, los fondos garantizados se dejaron un 1,4%.