La renta variable española sufre, y mucho, en la penúltima sesión de la semana. El Ibex 35 despidió la jornada con una penalización superior al 1.7% que le llevó a los 8608  puntos. Una caída que se contagió al resto de plazas europeas: el DAX perdió un 2.3%, el CAC-40 también superó el 2% de caída en tanto que el Eurostoxx 50  se mantuvo en torno a los 2.274 enteros.

Bancos, deuda y agencias de calificación. De nuevo las tres variables vuelven a coincidir en una misma sesión. El sector financiero europeo podría necesitar hasta 100.000 millones de euros si finalmente se produjera una recapitalización. Al menos son las cifras que barajan las autoridades europeas que cifran entre 70.000 y 80.000 millones las necesidades de capital de la banca. Una cifra que se espera quede cifrada definitivamente este fin de semana. Una cita que podría aplazarse – según se especula- ante la falta de acuerdo y avance en las negociaciones. Es precisamente este sector el que más ha sufrido durante la sesión, con pérdidas que , en muchos casos, han superado el 5%. (Ver cuadro adjunto).



En este escenario, España ha conseguido colocar 3.906 millones de euros en bonos a seis, ocho y diez años. La mayor parte, 1.788 millones de euros, se adjudicó en los bonos a diez años. La demanda se mantuvo en línea con subastas anteriores. La ratio de cobertura apenas bajó de 1,9 a 1,8 veces. El coste presentó una mejora más significativa respecto a la subasta previa de bonos a diez años, la celebrada el pasado 21 de julio. La rentabilidad media bajó desde el 5,896% hasta el 5,433%. En los bonos a ocho años, el interés medio fue del 5,11%, y del 4,782% en los títulos a seis años.

Y eso a pesar de Moody´s, que ha recortado la nota a diez Comunidades Autónomas, dos provincias vascas y a los grande bancos nacionales – Santander, BBVA, La Caixa, CaixaBank y CECA- a los que rebaja un escalón y los sitúa con perspectiva negativa. En este escenario no extraña que sea el sector financiero español el más perjudicado de la sesión.  BBVA perdió un 4.9% quedó en los 6.14 euros. Banco Santander descontó un 4.8% de su cotización, hasta los 5.86 euros. Y con ellos, Banco Popular perdió un 4.7%, Banco Sabadell descontó un 3.65% de su cotización en tanto que el Bankinter - que mañana publicará resultados con unas previsiones de beneficio de 144 millones de euros en los nueve primeros meses del año-  perdió un 2.7%, con lo que mañana comenzará a cotizar desde los 4.30 euros.

Los números rojos no discriminaron. El resto de pesos pesados también cotizaron en negativo. Telefónica perdió un 2.8% y cerró en los 14.66 euros. Repsol superó el punto porcentual de caída, hasta los 21.40 euros, mientras que Iberdrola marcó en los 5.06 euros su último precio, tras una penalización del 3.35%. Inditex logró sobrevivir a la quema del mercado y, al ritmo del 2.17%., cerró en los 66.92 euros. Ebro Foods le acompañó: sumó un 0.32%, con lo que mañana dará su primer paso en los 13.99 euros.