Las solicitudes iniciales de desempleo en EE.UU. se situaron un 410.000 la semana que terminó el 12 de febrero, lo que supone un incremento de 25.000 peticiones respecto a la semana anterior y supera en 10.000 las previsiones de los analistas.

La cifra es también superior a los 385.000 de una semana antes. Los reclamos continuos ascendieron a 3,911 millones frente a 3,893 millones esperados.