José Ignacio Goirigolzarri inició su intervención afirmando que América Latina vive un gran momento y que en un contexto de turbulencias en los mercados financieros globales, está mostrando una gran resistencia, como demuestra que Brasil y Perú han conseguido el investment grade. En su opinión, ese excelente comportamiento se debe a dos factores fundamentales. “Por un lado –dijo-, que la abundancia de materias primas en Latinoamérica ha propiciado un incremento espectacular en los flujos comerciales con áreas que tienen un crecimiento muy dinámico; y por otro, un manejo más responsable de las políticas fiscales y monetarias en las últimas décadas”. “Como resultado de esos factores, la región asiste al mayor periodo de estabilidad de los últimos 25 años”, subrayó el consejero delegado de BBVA, quien señaló que, a pesar de ese buen momento, “Latinoamérica aún puede aspirar a más”. “Así –afirmó-, Latinoamérica no ha alcanzado su potencial de crecimiento, como sí lo han hecho otros países emergentes, especialmente asiáticos. Por ello, es necesario seguir profundizando en aquellas reformas necesarias para que Latinoamérica pueda explotar todo su potencial y lo haga de forma sostenible en el tiempo”. En esa línea, José Ignacio Goirigolzarri apuntó que, “en particular, la región debe avanzar en la liberalización del mercado de trabajo e incrementar los niveles de inversión en innovación y capital humano, especialmente en educación”.Una inversión de 14.200 millonesEl consejero delegado de BBVA reafirmó que la apuesta de BBVA por la región “fue acertada y tenía sentido”. Dicha apuesta empezó en 1995 con la adquisición de Probursa en México y Banco Continental en Perú. Desde entonces, el Grupo ha realizado nuevas adquisiciones en Colombia, Argentina, Venezuela, Puerto Rico, Brasil y Chile, con una inversión total de 14.200 millones de dólares.Como resultado, BBVA gestiona hoy un volumen de créditos en Latinoamérica de más de 50.000 millones de euros (incluye América del Sur y México); unos recursos (ex pensiones) de más de 70.000 millones de euros, y más de 41.000 millones de euros en planes de pensiones, y cuenta con 66.075 empleados y 3.626 oficinas, en las presta servicio a más de 26 millones de clientes bancarios y 5 millones de afiliados a planes de pensiones.“En definitiva –señaló-, Latinoamérica es de una enorme relevancia para BBVA, suponiendo el 44,4% del beneficio total del Grupo BBVA”. En el primer semestre de este año, el beneficio proveniente de Latinoamérica ha superado por primera vez la cifra de 1.300 millones de euros en seis meses. “Por ello, estamos convencidos que el Grupo BBVA va a cerrar en 2008 el mejor año de su historia en América”, aseguró.A continuación, el consejero delegado se refirió a que en ese periodo, el Banco no sólo ha obtenido beneficios, sino que también ha realizado grandes contribuciones a la región. Puso como ejemplo la intensa política de acción social del Grupo BBVA, a la que destinó 69 millones de euros en 2007, un 22% más que en 2006.Igualmente, destacó de manera especial la decisión de destinar al Plan de Acción Social el 0,7% de los beneficios locales del Grupo en México y el 1% de todos los países de América del Sur. Este Plan de Acción Social se centra en la educación de colectivos desfavorecidos y su principal iniciativa es el programa Becas BBVA Integración, en el que el Banco invertirá 28 millones de euros este año con el objetivo de becar a más de 28.000 niños. “Porque invertir en ecuación es invertir en un futuro mejor para las personas”, recalcó.Tras resaltar la importancia de la Acción Social, el consejero delegado de BBVA comentó que, quizá, las grandes empresas puedan contribuir de una forma más decisiva a incrementar los niveles de desarrollo económico y bienestar social. ¿Cómo?, se preguntó. “Haciendo lo que mejor sabemos hacer, que en el caso de las entidades financieras se traduce en la contribución a incrementar los niveles de bancarización de la región”.
Acceso universal A su juicio, el sistema financiero de un país es esencial para impulsar su desarrollo económico: “La reciente crisis financieras internacional pone de manifiesto cómo los problemas en el sistema financiero pueden frenar el crecimiento. Esto reafirma la importancia de unas instituciones sólidas, bien gestionadas y consolidadas en la sociedad”.“Siendo esto así –añadió-, Latinoamérica debe profundizar en aquellas políticas que contribuyan al fortalecimiento del sistema financiero y que faciliten el acceso universal al mismo”. Según sus datos, se estima que 4.000 millones de personas, dos terceras partes de la humanidad, participan poco o muy poco de la economía monetaria. O sólo un cuarto de la población mexicana, peruana o venezolana, o un 40% de la colombiana tienen acceso al sistema financiero formal.“Los gobiernos deben colaborar con las instituciones financieras para impulsar mayores niveles de penetración de los productos y servicios financieros”, afirmó José Ignacio Goirigolzarri, quien puso como ejemplo a México, donde la red de terminales punto de venta se ha triplicado en los últimos cuatro años.“Pero siendo esencial el apoyo regulatorio, son las propias entidades financieras las que deben contribuir de manera decidida a facilitar el acceso a los productos y servicios financieras a más segmentos de población”, añadió el consejero delegado de BBVA, que a continuación expuso el modelo de bancarización que ha puesto en práctica el Banco, un modelo de negocio diferente basado en el aumento de la penetración del crédito y la concentración de la transaccionalidad en la tarjeta y los canales alternativos. Como fruto de esta estrategia, el Grupo ha crecido en 10 millones de clientes en los últimos cinco años y espera llegar a 30 millones de clientes bancarizados en 2010 desde los 26 millones actuales.Apoyo a las microcréditos
En este contexto, se refirió especialmente al acceso a los productos y servicios financieros de los segmentos de más bajos ingresos de la población. “Las microfinanzas han demostrado cómo el negocio bancario puede extenderse con éxito a los segmentos de población tradicionalmente excluidos”, subrayó José Ignacio Goirigolzarri, que puso como ejemplo la Fundación BBVA Microfinanzas, una entidad que tiene como fin promover el acceso a los servicios financieros de los pequeños empresarios con bajos ingresos.El Grupo BBVA dotó en 2007 con 200 millones de euros a esta fundación, que reinvertirá todos sus beneficios en nuevas inversiones en la región. Hoy, a través de la fundación ya se han comprometido e invertido efectivamente 90 millones de euros en el desarrollo de una red en Latinoamérica: ya tiene operaciones en Perú, Colombia y Puerto Rico, y para finales de ese año estará presente en otros países como Brasil, Argentina, Chile y Costa Rica.La Fundación BBVA Microfinanzas atiende ya a 325.000 clientes en la región, cuenta con 1.700 empleados, una red de 140 oficinas, y su volumen total de microcréditos asciende aproximadamente a 300 millones de dólares. Para entender la dimensión del proyecto, baste decir que en España las entidades que se dedican a este segmento del mercado, en su mayor parte cajas, tienen en total 2.300 clientes atendidos, con una exposición de entre 20 y 25 millones de euros.Para concluir su intervención. José Ignacio Goirigolzarri afirmó: “América Latina forma parte del ADN del Grupo BBVA, es parte inherente del mismo. Hoy nadie entendería este Grupo sin la presencia y contribución de nuestros bancos latinoamericanos”.

