Los administradores de Duro Felguera Australia (DFA) han aprobado de forma definitiva el convenio de acreedores sin solicitar a la matriz el reintegro de 60,1 millones de euros, un pago sobre el que el grupo reconocía la existencia de incertidumbre.
Según ha comunicado Duro Felguera a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), los administradores de DFA "no iniciarán acción alguna de reintegración" en relación con los pagos realizados por importe de 60,1 millones a la matriz entre los meses de septiembre y noviembre de 2019 en concepto de devolución del préstamo concedido en el pasado por el grupo a la filial.
La compañía explica que ha renunciado a un crédito a su favor por importe aproximado de 870.000 euros al cambio, que quedó provisionado en el ejercicio 2019. Los pasivos de su filial australiana serán liquidados exclusivamente con sus activos en los términos y condiciones incluidos en el convenio de acreedores bajo la legislación del país.
Duro Felguera señala que el convenio de acreedores elimina la incertidumbre sobre el eventual reintegro de cantidades contra la matriz a la que se hacía mención en las cuentas anuales de 2019 y dado que el 28 de febrero de 2020 se produjo la salida de Duro Felguera Australia del control y del perímetro de consolidación del grupo, la aprobación del mencionado convenio de acreedores no va a tener ningún impacto económico en Duro Felguera.
El mercado ve con buenos ojos este movimiento, y las acciones de la compañía especializada en la ejecución de proyectos llave en mano para los sectores energético e industrial han llegado a subir este jueves más de un 7% en el mercado continuo. Duro Felguera se revaloriza este 2020 más de un 40%.