Gráfico que muestra la divergencia entre el S&P500 y el índice de semiconductores:





la curiosidad estriba en la superación del índice de semiconductores de la resistencia del rango de “trading” formado tras las caídas de agosto, mientras que el S&P500 no ha hecho aún lo propio con respecto a los máximos marcados a finales de ese mes. Podría ser una lectura adelantada sobre el devenir del S&P500 que tendremos que ir confirmando en los próximos días.