Los responsables del BOJ debatirán medidas para facilitar la financiación de las empresas japonesas, entre ellos un incremento de la compra de bonos a largo plazo emitidos por el Gobierno antes de que concluya el año fiscal a finales de este mes.


La economía japonesa está en recesión desde 2008 y ,en el último trimestre del año, descendió un 12,1 por ciento, su mayor contracción en 35 años.


Ante esta situación, el BOJ aprobó medidas de emergencia como la compra de acciones de empresas propiedad de entidades bancarias, para así reducir el riesgo de pérdidas vinculado a la caída de las plazas bursátiles japonesas.