Poco a poco día se va ajustando al precio que marca la ampliación de capital, que supone de nuevo un golpe añadido al ya castigado inversor minorista. Y se colocaba, además, al cierre de ayer en nuevos mínimos históricos. La volatilidad es inmensa en el valor, con volúmenes de negocio muy por encima de lo habitual.
Ya saben que DIA está inmersa en su enésima reconversión, en especial desde que se hiciera cargo de ella el magnate ruso Mijael Friedman a través de su vehículo inversor Letterone. Una ampliación de, como máximo 1.028 millones de euros, que promete poner al día las cuentas de la compañía. Con 769 millones que derivan de la conversión de deuda en fondos propios y 259 más de un tramo de caja para los accionistas minoritarios.
Pero lo cierto es que la realidad inmediata es la sangría en bolsa. En las 11 últimas sesiones, solo el macrorebote de casi el 12% es lo que salva de la quema a Día. El resto son recortes muy profundos, del 38% para el valor. Todo ello le coloca como el cuarto peor valor del Mercado Continuo con caídas acumuladas anuales del 52,6%.
Les recordamos a los minoritarios que pueden adquirir hasta 100 acciones nuevas a 0,02 euros cada una en estos 6 días que quedan para hacerlo, una por cada trece que mantengan en su cartera. El día 27 de julio es el último para hacerlo efectivo, para unas acciones, que, si todo va bien, comenzaran a cotizar en el mercado el próximo 12 de agosto.
De momento no está claro el control que LetterOne tendrá de la compañía cuando esto termine y que de momento ronda el 74%. Todo dependerá del nivel de inversores particulares que acuda a la ampliación. Y recordamos que hace menos de dos años ya se produjo otra ampliación.
Todo un intrincado proceso que incluye además la reducción de su deuda en torno a un 60%. La dirección considera que esta operación fortalecerá su solvencia y mejorará su liquidez. La empresa no tendrá que afrontar vencimientos significativos de deuda hasta finales de 2025. Y es que incluye la extensión del vencimiento de un préstamo sindicado que sobrepasa los 902 millones de euros en dos años y medio por parte de los acreedores implicados.
Y Día, además, se convierte en el peor valor entre las valoraciones de los indicadores premium de Estrategias de Inversión con 0 de 10 puntos posibles. La tendencia es bajista a medio y largo plazo, el momento total es negativo, tanto lento como rápido.
Mientras el volumen de negocio, en sus dos vertientes, a medio y a largo plazo también se muestra decreciente, mientras que la volatilidad del valor, medida en términos de su rango de amplitud es creciente a medio y largo plazo.
