Teniendo en cuenta los resultados recurrentes, el beneficio se situó en 747,9 millones, un 2,1% más, frente a los 732,7 millones de hace un año. El volumen de negocio fue de 277.000 millones (+3,3%).


Por otro lado, la morosidad de la caja de ahorros se situó en el 5,55% en junio, dos puntos básicos menos en relación al 5,57% de marzo, pero multiplica casi por tres la de junio de 2008, del 1,89%. La tasa de cobertura se colocó en el 41%, frente a la del 110,2% del mismo periodo del ejercicio anterior.


Asimismo, los créditos a la clientela se situaron en 118.222 millones, lo que supone un incremento del 3,1%, mientras que los recursos de clientes en balance alcancaron 142.891, lo que significa un avance del 5,5%.