En total, las plantas que ha comprado Befesa, que cuentan con la "más alta tecnología existente en el mercado", tienen una capacidad conjunta de tratamiento de 380.000 toneladas anuales de residuos, con un valor de reposición superior a 100 millones de euros.

Befesa cuenta ya con dos plantas para el reciclaje de escorias salinas, una en Valladolid y otra en Gales (Reino Unido), con una capacidad conjunta de gestión de 230.000 toneladas actuales. Según la compañía, con las tres plantas que ha adquirido en Alemania, se posicionará como empresa líder en Europa en el reciclaje de escorias salinas.

La operación ha obtenido ya la aprobación de las autoridades alemanas de Competencia. La financiación externa para llevarla a cabo la ha facilitado Commerzbank, en el marco de una operación sin recurso.