El consejero delegado del Sabadell aseguró que el nivel de provisiones es "confortable" y recordó que las dotaciones dependerán también de la capacidad para generar plusvalías. "Dependerá de la alegría de los atípicos", sostuvo. Hasta marzo, contabilizó 30,5 millones de euros por la venta de activos inmobiliarios, de los que 20,3 corresponden a la venta de la sede de Banco Urquijo en Madrid.
Con todo, avanzó que en el próximo trimestre sí recurrirán a las provisiones genéricas, hasta ahora intactas y en el mismo nivel que en diciembre de 2008. "Contaremos con las genéricas porque el equilibrio de las cuentas lo requiere", justificó.
Sobre la venta de parte de su red de oficinas para después seguir en ellas en alquiler, Guardiola explicó que la operación sigue estando en el horizonte, aunque ahora no sea una necesidad, gracias a las plusvalías obtenidas por la recompra de preferentes. "La haremos siempre y cuando nos gusten las condiciones; está en la agenda", sostuvo.
OPTIMIZACIÓN CONTÍNUA
La entidad que preside Josep Oliu sigue inmersa en el Plan Óptima para ganar en eficiencia operativa y racionalizar costes. Según Guardiola, en los dos últimos años el banco ha registrado un crecimiento negativo en oficinas y prevé cerrar este 2009 con 18 oficinas menos (tres aperturas y 21 cierres). A 31 de marzo, el banco contabilizaba 1.229 sucursales.
Este proceso también ha tenido su impacto en plantilla, ya que se ha visto reducida en 261 empleos, hasta 9.668 personas. Para Guardiola, esta cifra supone el grueso del recorte previsto para este ejercicio.
"Este 2009 seguiremos focalizados en mejorar nuestros ratios, en tener un banco sólido y saber trasmitirlo al mercado", concluyó Guardiola, tras dejar claro que el Sabadell si tiene oportunidades, las aprovechará.
