Un portavoz de BAA, el gestor de aeropuertos británico controlado por Ferrovial se limitó a señalar que la operación no estaba cerrada y que "continúan las negociaciones" con los posibles compradores. GIP es un participado por Credit Suisse y General Electric.

Dos fuentes diferentes dijeron que se trabajaba en el cierre de la operación para antes del 19 de octubre, fecha en la que BAA tiene que declarar ante la Comisión de Competencia británica con respecto a la apelación sobre la recomendación de la autoridad de vender tres aeropuertos.

Las fuentes añadieron que el acuerdo gira en torno a un precio de entre 1.650 y 1.800 millones de euros, próximo al 95 por ciento del RAB (valor de los activos regulados) del aeropuerto.