Las negociaciones de fusión con Iberia llevan manteniéndose desde hace un año y se han estancado en cuestiones como el tamaño del déficit de pensiones de BA o la constitución del accionariado conjunto.

La semana pasada dimitió el presidente y consejero delegado de Iberia, Fernando Conte, aunque la aerolínea española dijo que la decisión se produjo por motivos personales y que no estaban relacionados con el estancamiento de las negociaciones. Conte será sustituido por Antonio Vázquez, ex miembro del consejo de Iberia y con experiencia en negociaciones dado que el año pasado supervisó la venta de Altadis a Imperial Tobacco Group  por 12.600 millones de euros. El presidente de BA, Martin Broughton, dijo que aunque se han sentido frustrados con la lentitud del progreso de las negociaciones con Iberia, la fusión con la aerolínea española es el mejor camino a seguir y que tienen esperanzas en que los cambios en el equipo directivo de la española podrían ayudar en las negociaciones.


BA asimismo dijo que está explorando opciones para recaudar más fondos para ayudarle a atravesar el fuerte declive que vive el sector dado que prevé que el tráfico premium -clave para la aerolínea- podría no recuperar nunca los niveles vistos antes de la crisis.

La aerolínea dijo que no cree que las condiciones del mercado sean las adecuadas ahora mismo para realizar una ampliación de capital, aunque la compañía reconoció que necesita recaudar fondos.

British Airways, una de las aerolíneas más afectadas por la crisis por su gran dependencia del tráfico premium en las rutas trasatlánticas, ha adoptado varias medidas para recortar los costes, como el recorte de salario de pilotos y tripulantes de cabina, la petición a los empleados de que se tomen un mes de descanso sin paga y la reducción de su capacidad. Aún así, se enfrenta a una serie de problemas financieros, como un elevado déficit del fondo de pensiones que podría haber aumentado en al menos 1.200 millones de libras desde septiembre.

El grupo advirtió a los beneficiarios del fondo de pensiones que no puede aumentar su contribución a los fondos y que habría que acordar un nuevo plan de fondos de pensiones.

Broughton, también dijo a los accionistas que el consejo de administración no podría recomendar el pago de un dividendo este año.