Caídas en la renta variable española para comenzar la sesión. Parece que poco importa la aprobación – por parte del congreso estadounidense- para elevar el límite de endeudamiento legal de Estados Unidos. Una decisión que allana el camino para aprobar un plan de recorte del déficit de 2.1 billones de dólares. Ni tampoco se ha tenido en cuenta el dato de paro en nuestro país, que bajó en 42.059 personas en el mes de julio, dejando la cifra total de parados en 4.07 millones de personas. El Ibex 35 se deja un 0.8% en los primeros minutos de negociación y alcanza los 9.237 puntos, mínimos del año.

En terreno negativo, Ebro Foods se convierte en el valor más penalizado con recortes del 1.75% que le llevan a los 12.89 euros. Le acompaña Gamesa que,  al ritmo del 1.5%, marca en los 4.88 euros su primer movimiento. OHL cierra el podio de las mayores penalizaciones al descontar un 1.4% de su cotización.

Los pesos pesados del selectivo español luchan por mantener ligeros beneficios en la apertura. Santander recorta un 0.06% en los primeros minutos de negociación. Lo hace un día después de comunicar a la CNMV que tiene una participación en Metrovacesa del 34.88%  y en una sesión en la que Mediobanca ha rebajado de sobreponderar a neutral su estimación sobre la entidad. BBVA cede un 0.20% y cotiza en los 6.20 euros.

Siguiendo con los grandes valores, Telefónica baja un 0.85% en la jornada en la que JP Morgan ha elevado hasta sobreponderar su recomendación sobre la operadora, con un precio objetivo de 19.5 euros. Repsol se deja un 0.8% en la apertura y abre en los 21.17 euros.

Pocos valores logran amancer en positivo. Mucha  volatilidad en los primeros minutos de negociación que provoca que Técnicas Reunidas se eleve casi como único valor que cotiza con ligeras ganancias hasta los 29.38 euros.

Prima de riesgo, en máximos

La sesión también hace estar pendietes de referencias como la prima de riesgo española que comenzaba hoy la jornada en 383 puntos básicos, un nuevo máximo desde la creación del euro, castigada un día más por las dudas de los mercados sobre la economía estadounidense. El rendimiento que tiene que ofrecer el bono español a diez años para que los inversores lo compren en lugar del alemán subía al 6,293%, frente al 6,200 % de ayer, igual que el alemán, que también elevaba la rentabilidad del suyo al 2,460 % desde el 2,453 % previo,




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