Apertura con subidas en Wall Street que sirve al parqué neoyorkino para ampliar los avances que ya registró en la sesión de ayer. El Dow Jones sube un 0,96%, el S&P 500, un 0,99% y el Nasdaq, un 1,07%.
Con el Dow Jones en los 23.973,54 puntos, Chevron lidera las subidas con un avance del 3,35%, por delante de Exxon Mobil y de Dow, que repuntan un 3,20% y un 2,90%, respectivamente.
Las petróleras de Wall Street se apoyan en los repuntes de los precios del petróleo a medida que más países comienzan a reabrir sus economías, lo que incrementa las previsiones de recuperación de la demanda.
El Brent de referencia en Europa avanza un 11,88% hasta los 30,42 dólares por barril, mientras que el West Texas se dispara un 17,85%, hasta los 24,00 dólares.
Por el contrario, Walt Disney lidera las caídas del selectivo al ceder un 1,53%, seguido de P&G, que recorta un 0,36%, y de Verizon, que se deja un 0,32%.
El S&P 500 ha subido aproximadamente un 30% desde sus mínimos de marzo debido a medidas de estímulo sin precedentes y signos de una meseta en los nuevos casos de COVID-19 en muchas áreas.
Sin embargo, muchos expertos del mercado han advertido que la recuperación podría ser probada en medio de un riesgo de otra ola de infecciones de virus y con la creciente evidencia del daño a la economía y las empresas estadounidenses.
De esta forma se mantendría la tendencia positiva en Wall Street, después de que sus principales índices rompieran ayer su racha negativa de dos días, gracias a que las ganancias en las grandes empresas de tecnología e Internet y los precios del petróleo superaron las preocupaciones sobre las últimas tensiones entre Estados Unidos y China y el sentimiento negativo de la reunión anual de Berkshire Hathaway de Warren Buffett.
Wall Street abrió con pérdidas, preocupado por la amenaza del presidente de EE.UU., Donald Trump de imponer nuevos aranceles y restricciones comerciales a China por su gestión de la crisis del COVID-19, a lo que el secretario de Estado, Mike Pompeo, agregó este domingo que "existen suficientes pruebas" que conectan el virus a un laboratorio en Wuhan (China).
Pese a que la Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó este lunes que el coronavirus causante del COVID-19 tiene origen animal, refutando las afirmaciones de la Administración Trump, los inversores temen una escalada de tensión comercial similar a la de 2019 en las circunstancias de la pandemia y pendientes de una reapertura económica.
Dos funcionarios de alto nivel del Gobierno de EEUU indicaron ayer que no buscarán castigar económicamente a China si el país asiático respeta los compromisos comerciales realizados a principios de este ejercicio, a pesar de las crecientes tensiones de las declaraciones desde EEUU de que China ha gestionado mal el brote del coronavirus.
Los comentarios fueron realizados por Matthew Pottinger, un ayudante de un asesor de seguridad nacional, y por el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, tras el fuerte intercambio de declaraciones entre los Gobiernos de ambos países los días pasados, incluyendo una advertencia por parte del presidente de EEUU, Trump, la semana pasada de que podría imponer nuevas tarifas como castigo por la gestión de la pandemia del Covid-19.
Así, Pottinger señaló que EEUU no está buscando imponer medidas de sanción, sino que el presidente Trump monitorizará el acuerdo comercial de fase uno firmado con China en enero y estará muy pendiente de que el país asiático cumpla con su parte del acuerdo. Por su parte, Mnuchin afirmó que espera que China respete el acuerdo firmado, puesto que un incumplimiento tendría consecuencias muy significativas en las relaciones entre ambos países y para la economía global, ya que sería un aviso para los que realizan negocios con ellos.
En EEUU hoy se conocerán los PMIs finales de abril de servicios y compuesto tanto en EEUU como en Reino Unido, que vendrán a confirmar la drástica caída registrada por los datos preliminares. Asimismo, se dará a conocer el ISM de servicios del mismo mes con esperada caída a niveles incluso inferiores a los de 2008-2009. Además, se publicará la balanza comercial de marzo con esperada ampliación del déficit hasta 44.200 millones de dólares.
El dólar se fortalece frente al euro, mientras que la divisa comunitaria sufre el fallo alemán sobre las compras del Banco Central Europeo. El Bundesbank debe dejar de comprar deuda soberana bajo el plan de estímulo a largo plazo del BCE dentro de los próximos tres meses, a menos que el organismo europeo pueda probar que esas compras son necesarias-
El fallo supone un varapalo al Programa de Compras del Sector Público (PSPP por sus siglas en inglés) del BCE, que ha mantenido a flote la economía de la zona euro durante varias crisis y plantea la perspectiva de un nuevo conflicto entre el BCE y su mayor partícipe, Alemania.
Dado que el Tribunal de Justicia Europeo —el máximo tribunal en materia de derecho de la Unión Europea— ya ha dado el visto bueno a ese plan, el fallo del martes también plantea interrogantes sobre el futuro de la UE y la capacidad de supervivencia de sus instituciones.
