Los analistas de Societe Generale son bastante pesimistas con la evolución de la renta variable americana durante los próximos meses. “Después de subir un 170% desde los mínimos de marzo de 2009, pensamos que las acciones americanas son un activo cansado y con demasiados inversores”.

En su opinión, “la rentabilidad empresarial está cerca de su techo y el número de compañías que decepcionarán con sus cuentas aumentará. Además, un dólar más fuerte y el aumento de la rentabilidad del bono a 10 años no ayudará a un mercado que no es barato”.

Estos expertos prevén que el S&P 500 cierre 2013 en 1.600 puntos, alrededor del 5% por debajo de los precios actuales. Además, anticipan una corrección del 15% en el primer trimestre de 2014, cuando la Reserva Federal comience a retirar sus estímulos monetarios.

En este sentido, anticipan una caída del S&P 500 hasta 1.450 puntos en el 1T, para prever posteriormente una recuperación hasta 1.600 puntos a final de 2014. Para los próximos años, tampoco son positivos. “En los próximos dos o tres años, la bolsa americana permanecerá plana, debido a la mayor rentabilidad de la deuda, un dólar más fuerte y un potencial limitado de crecimiento de los beneficios. Aunque estará apoyada por mejores perspectivas económicas y un nuevo ciclo de valor para los accionistas, que aplazará un mercado bajista”.

C.P.O.