DOW JONES Ind Average vive una época para olvidar. Desde finales de marzo las caídas no han dejado ni una sola semana de resultado en el indicador, que, de forma consecutiva ha vuelto a marcar, la pasada semana, su séptima a la baja sin descanso. Se trata de la peor racha de descensos en el selectivo de 30 valores americanos más largo desde 2001, con esas estadísticas representativas que tanto gustan a los americanos.
Y todo tamizado, además, al menos en los últimos cinco días bursátiles, por la mejora de Nike y Salesforce por encima del 4% con el rebote en toda regla de los valores tecnológicos y la suma de más de un 3% en el más grande, en Apple. Aun así, solo siete valores recuperaban posiciones en la última semana y, en el mejor de los casos, en el de Amgen, no alcanzaba los 3 puntos porcentuales.
Y es que no podemos olvidar que, en la séptima semana a la baja, el Dow Jones, salvo por el rebote del viernes, acumulaba seis sesiones consecutivas a la baja dando cuenta, perfectamente, el ánimo bajista de los inversores. Así en su gráfica de cotización vemos que Dow Jones ha perdido un 2,14% en los últimos cinco días, lo que acumula una pérdida semanal del 6,54% para el indicador.
Esto se convierte en pérdidas trimestrales del 7,32% mientras que en lo que va de año, las caídas, sin alcanzar un mercado bajista, siguen floreciendo a doble dígito, con pérdidas del 11,40% desde el pasado 3 de enero. En interanual, el recorte alcanza el 6,36%.
Todo ello ha quedado atrás y ahora toca encarar esta nueva semana bursátil a la que hoy se enfrenta al mercado americano. En el caso del Dow Jones, los expertos indican que esta puede ser una semana de transición, a la espera de novedades, con la importante comparecencia mañana martes de Jerome Powell, el presidente de la FED, en una conferencia del Wall Street Journal.
De momento sus palabras en la entrevista de radio del jueves pasado en NPR, reiterando que es probable que haya subidas de tipos en Estados Unidos en junio y julio de 50 puntos básicos, y con probabilidad de 25pb más en septiembre, tranquilizó al mercado para cerrar al alza los indicadores el pasado viernes. Pero también que no podía garantizar un “aterrizaje suave” que redujera la inflación sin causar recesión.
Además, los inversores del Dow Jones estarán muy atentos, sin grandes referencias a considerar en la semana a los resultados de dos de sus integrantes, Walmart y Home Depot, que, en lo que va de año ganaran un 2,32% la cadena de supermercados y pierde un 28,67% el primer minorista de bricolaje mundial.
Otro factor a tener en cuenta es cómo responde Apple, la compañía que más pondera en el Dow Jones y que se ha convertido además en una de las más predominantes, en todos los indicadores, por supuesto por su peso en el mercado a pesar de haber dejó el primer puesto global entre las compañías, por sus pérdidas anuales del 17%, a la petrolera estatal saudí Aramco.
En cuanto a los indicadores técnicos que elaboran Estrategias de Inversión, vemos que Dow Jones, mantiene desde abril una puntuación a la baja, de apenas 2,5 puntos totales sobre los 10 posibles a los que puede optar el indicador
Su tendencia es bajista en ambas vertientes, tanto a medio como a largo plazo, su momento total es negativo, rápido y lento y su rango de amplitud es creciente a medio plazo. En el lado positivo destaca, sobre todo, el volumen de negocio, a medio y largo plazo que es creciente para Dow Jones, mientras que la volatilidad a largo plazo se mantiene decreciente.
