Informa el diario germano Frankfurter Allgemeine Zeitung que el Banco Central Europeo (BCE) habría llevado a cabo varias simulaciones para calcular el impacto sobre la inflación y la economía de un programa de compra de activos o QE. En concreto, esta flexibilización cuantitativa tendría una duración de un año y la autoridad monetaria adquiriría activos por importe de 80.000 millones de euros al mes.
El rotativo señala que los resultados del ensayo son dispares: “En el peor de los casos, una inyección considerable aumentaría la inflación en 0,2 puntos porcentuales; mientras que otro escenario baraja un incremento de la misma en hasta 0,8 puntos porcentuales”.
Por otra parte, el periódico alemán apunta a que el BCE confía en que el impacto de la festividad de Semana Santa “impulse” la inflación hasta el 0,8%-0,9% desde el 0,5% del dato preliminar de marzo.
S.C.