En torno a las tres de la tarde ha salido “el gordo” en la rueda de prensa de Mario Draghi, una rueda de prensa que estaba resultando claramente decepcionante (de hecho, los mercados de renta variable habían reducido significativamente sus ganancias ante la falta total de novedades, mientras el euro subía). Una vez más Draghi ha hecho “magia” con su labia declarando, literalmente, que “estamos cómodos” con la idea de actuar el próximo mes, en junio. Nada más “soltar” esta frase, las bolsas han recuperado rápidamente sus ganancias y ahora mismo cotizan en máximos del día. En concreto, el Ibex suma un 0,91% arriba, hasta los 10.508 puntos. El euro, por su parte, ha empezado a caer respecto al dólar y se ha quedado operando en la banda de 1,3890/95, con un mínimo intradiario en los 1,3879.
Antes de decir esto, nada destacable. El presidente del BCE ha vuelto a repetir que esperan una inflación baja durante un tiempo prolongado pero ha apaciguado los riesgos deflacionistas al afirmar que se observa presión alcista en los precios. Seguirán monitorizando muy de cerca los mercados y están listos para aplicar sus medidas excepcionales si es necesario.
En la fase de preguntas, se ha referido directamente a nuestro país, y ha señalado que los países tienen que seguir haciendo reformas estructurales, enumerando, por este orden, a España, Grecia, Irlanda y Portugal.
N.A.
