Walt Disney acaba de cerrar un semestre para olvidar, como el segundo peor valor del Dow Jones, con permiso de Nike, al que tan solo le ha ido un poco peor, con recortes que rozan el 40%. Pero eso es el pasado y hay que concentrarse en lo que vendrá tras un trimestre marcado por las piedras en el camino, algunas de ellas protagonizados por los traspiés de su consejero delegado.
Ahora la Junta se centra en el futuro y lo primero para hacerlo ha sido renovar a Bob Chapek al frente de la compañía durante tres años más. Han extendido su contrato durante tres años más, desde febrero de 2023, cuando inicialmente expiraba su contrato.
El mercado no apostaba directamente por una renovación sin fisuras tras los problemas de la compañía en la primera parte del año. En especial por los acontecimientos en Florida ante la denominada ley anti LGTBI “no digas gay” que tantos disgustos ha dado a la compañía, como la derogación de sus prebendas especiales en el distrito de Reedy Creek que gobernaba a placer. Pero también el despido fulminante de Peter Rice, un alto ejecutivo de la casa que sonaba como su sucesor.
Pero todo parece perdonado para un Bob Chapek que cogió el testigo dejado por Bob Iger justo antes de la pandemia y ha tenido que llevar el barco de Mickey Mouse por lugares casi desconocidos y con el acierto de la apuesta decidida por el streaming, incluso para los grandes estrenos de la casa, su gran acierto al frente de Disney, con cruceros, cines y parques temáticos cerrados.
A pesar de ello Disney refleja un más que negativo comienzo del año, con recortes del 1,7% en los cinco días precedentes, del 11,5% en el mes, de casi el 30% trimestrales y que rozan el 38% en lo que llevamos de año, mientras sus acciones cuestan en el mercado unos 96 dólares tras el afterhours.
Sobre el futuro y lo que piensan los expertos del mercado, se fijan principalmente en la potencialidad de Disney +, que, a la espera de los próximos resultados, no está siguiendo el camino equivocado que tanto le está costando a Netflix en su cotización en el mercado. Todavía esperan alcanzar un nivel de suscriptores para 2024 de entre 230 y 260 suscriptores mundiales.
También buenas noticias para su Shanghái Park que acaba de reabrir sus puertas el pasado 30 de junio, tras el cierre desde el 21 de marzo pasado por la política de Covid cero del gobierno chino. Aunque con una capacidad limitada en su ejecución, incluso con una prueba negativa 72 horas antes de la entrada en el parque. Un segmento, el de los parques temáticos, que ya ha facturado el doble frente al pasado año en el último trimestre y que se espera mejore a lo largo del verano. Ya de hecho representa, tras la dura pandemia, un tercio de sus ingresos totales.
En cuanto a recomendaciones, desde Tipranks de los 23 analistas que siguen el valor, 16 se decantan por comprar y 7 más por mantener sus acciones en el mercado con un precio objetivo medio que se encuentra en los 140, 77 dólares, con un precio objetivo máximo de 176 dólares y un mínimo de 110. En el caso del PO medio, el potencial alcista que se le otorga al valor supera el 46,2%
Mientras desde Morgan Stanley recortan el precio objetivo de las acciones de Disney hasta los 125 dólares desde los 170 anteriores con recomendación de sobreponderar el valor en el mercado. Es positivo en realidad ante el valor su analista Benjamin Swinburne por su negocio de parques y experiencias, aunque ha reducido las estimaciones sobre Disney + al entender que su contenido está infravalorado. Considera que el menor consumo se dejará sentir en la plataforma, así como la pérdida de los derechos de la liga de cricket en la India.