“El fondo del mercado a corto-medio plazo se está despejando”, afirma Daniel Pingarrón, de IG Markets. Ahora bien, en las próximas fechas las bolsas “contarán con dos nuevos retos: las cuestiones técnicas y los detalles sobre las últimas actuaciones anunciadas por el Banco Central Europeo” (BCE).

Sobre las “cuestiones técnicas”, este experto explica que nos enfrentamos a “dos asignaturas pendientes, ambas estrechamente vinculadas: la superación definitiva de los 2.000 puntos en el S&P 500, y la consecución de nuevos máximos anuales en las bolsas periféricas europeas”.

Recuerda este analista que “el índice americano lleva desde el 19 de agosto cotizando entre 1.980 y 2.010 puntos, en un ejercicio de consolidación impecable. El ascenso por encima de esta resistencia será uno de los puntales alcistas más notorios para las bolsas mundiales en el cuarto trimestre del año”.

Sobre la segunda cuestión, este mismo lunes hemos tenido la comparecencia del presidente del BCE, Mario Draghi, en la que “no ha dejado grandes titulares. Se ha mostrado tranquilo con la baja demanda de la banca europea en la primera subasta TLTRO (aludiendo a los test de estrés y a la nueva subasta que se celebrará), y ha vuelto a repetir mantras de vigilancia de la inflación, débil recuperación y disponibilidad absoluta a nuevas medidas si éstas se precisasen”.

Considera Pingarrón que “en la próxima reunión del BCE también habrá explicaciones y matizaciones que el mercado seguirá de cerca, sobre los detalles del plan de compra de ABS. En el subconsciente de los inversores continua la posibilidad de que la autoridad monetaria pueda emprender a medio plazo un programa de relajación cuantitativa. Así pues, tras los últimos acontecimientos, la normalidad parece cotizar al alza, lo que es sin duda una buena noticia para las bolsas”.