Cisco Systems ha sido considerado durante muchos años, como cuenta The Wall Street Journal, como un indicador muy fiable de la demanda de tecnología empresarial y sus resultados del último trimestre, que conocíamos hace unas semanas han dejado muy tocado al valor, tras marcar sus mínimos del ejercicio. Situación de la que le está costando mucho salir.
Por un lado, la compañía marcaba por segunda vez en cinco años ingresos por debajo de lo esperado, 12.800 millones, un 4% por debajo de las estimaciones. Pero además estimaba para el presente trimestre datos de 12.700 millones, un 8% por debajo en sus guías. Cifras inesperadas de ventas a la baja, mirando directamente a los bloqueos chinos por el Covid-19 y al efecto pernicioso de la guerra rusa sobre Ucrania.
Cifras para olvidar que, sobre todo, dan vuelta a las previsiones de crecimiento de un 6% en sus ingresos próximos, mientras que la empresa espera una caída de entre un 1 y un 5,5% interanual, dando claramente una sorpresa negativa al mercado. La inflación al final, lo invade todo. Y por si lo que hemos contado no fuera suficiente, su responsable financiero, Scott Herren, indicaba que la escasez de componentes iba a perdurar durante los próximos trimestres.
Toda una consecución de datos negativos que le llevaron a ceder un 13% tras la publicación de resultados en su peor sesión en más de una década y aunque ha recuperado ligeramente terreno, no corrige en gran modo sus pérdidas.
En su gráfica de cotización vemos que el valor apenas gana un 0,3% en la última semana, con recortes del 6,7% en el mes, del 18,9% son las caídas trimestrales y, en lo que va de año, Cisco pierde en el mercado un 28,4%. De esta forma se convierte en el tercer peor valor en lo que va de año dentro del Dow Jones, tras Boeing y Disney.
Otra de las razones que arguyen los expertos es que el valor, a pesar de sus millonarias y numerosas adquisiciones, se ha quedado atrás en el liderazgo tecnológico, como señala Seeking Alpha. Y con la inflación disparada y la subida de los tipos de interés, y a pesar de su margen de endeudamiento, lo cierto es que hace más difícil ampliar su familia corporativa.
Solo desde 2015 ha gastado 20.000 millones en compras en el mercado y ahora su desempeño comercial se está deteriorando. Aunque los expertos no descartan que esta política continúe y que una gran adquisición en ciernes pueda sacar del hoyo en el que se ha metido al valor.
Desde Tipranks de los 20 analistas que siguen el valor, la mitad exacta, 10 expertos optan por comprar el valor en el mercado, con 9 que se decantan por mantener y uno más vender. Su precio objetivo medio, alcanza los 52,17 dólares por acción, con potencial alcista del 15% para las acciones de Cisco.
Y siguiendo con las recomendaciones sobre el valor, todas tienen algo en común: han recortado su precio y de forma significativa. Jefferies mantiene la recomendación de compra de las acciones del valor, pero lo cierto es que ha rebajado sensiblemente su precio objetivo hasta los 52 dólares desde los 65 anteriores para el valor en el mercado.
Lo mismo, aunque en menor medida es lo que ha hecho JPMorgan que ha recortado su expectativa de PO hasta los 62 dólares desde los 67 anteriores con apuesta de sobreponderar sus acciones. Y esa misma dinámica es la que ha seguido Wells Fargo con recorte de precio objetivo hasta los 52 dólares desde los 65 anteriores, con igual ponderación.
Mientras, Evercore rebaja la expectativa de PO hasta los 50 dólares desde los 62 anteriores, mientras sobrepondera el valor en el mercado. A todos ellos se suma también Credit Suisse que rebaja hasta los 60 dólares desde los anteriores 72 su precio objetivo, aunque sobrepondera las acciones de Cisco.